Córdoba.- Desde mediados de abril, el anuncio de la visita de AMLO a Córdoba comenzó a mover a los simpatizantes de Morena. La visita del candidato a la Presidencia de la República no es un tema menor, sea del partido que sea.
Dos oficios anunciaron a la Presidencia Municipal, la intención del partido de llevar a cabo el mitin en el Centro de la ciudad. El primero, lo anunciaba en el parque 21 de Mayo y, ante la negativa del Gobierno Municipal de autorizar el lugar debido a un evento infantil ya programado, el segundo indicó que lo harían sobre la avenida 1, a todo lo largo de la franja comercial más importante de la ciudad.
A este último, el síndico José Medina Rahme respondió formalmente que tampoco lo autorizarían, debido a la petición de los comerciantes, de no entorpecer las actividades en el Centro.
Los ‘‘morenos’’, entonces, dejaron los oficios, y definieron su estrategia: llevarían a cabo el mitin en el Centro de la ciudad, porque, y así lo resumió el candidato a gobernador por Morena, Cuitláhuac García, “no se pide permiso para ejercer un derecho”. Minutos después de la media noche del domingo 29, los camiones con el equipo de sonido, templete, vallas y demás equipo para el mitin, llegaron por la autopista, a la avenida 11. Ahí, fueron interceptados por patrullas de Vialidad y Seguridad Pública, cuyos elementos les impidieron el acceso hacia el Centro.
Luego de discusiones, intentos de diálogo, exigencias por el derecho a reunión y concentración para el evento de proselitismo político, y ante la reiterada negativa de la autoridad municipal, los “morenos” decidieron instalarse ahí, junto al Parque Centenario. Desde las 2 de la mañana del lunes, la entrada a la ciudad por esa vía –la más importante de acceso- quedó bloqueada.
A partir de ahí, todo el manejo de ambas versiones se dio por las redes sociales. Decenas y luego cientos de comentarios en Facebook y twitter dieron cuenta de la “agresión” de la autoridad municipal, encabezada por Lety López, hacia López Obrador, su propuesta y su mitin. En el transcurso del lunes, la versión se cambió hacia el gobernador Yunes Linares, quien no solamente había enviado las botargas de Chávez a Xalapa, al inicio de campaña de Cuitláhuac García, sino ahora, intentado boicotear el mitin de López Obrador.
Lety López, por su parte, desde muy temprano recorrió las estaciones de radio de la ciudad para informar del bloqueo del acceso a la ciudad, y las razones de su gobierno para no autorizar el mitin en el Centro.
Luego, dio una conferencia de prensa con la misma intención. Insistió en que se habían ofrecido a los representantes de Morena al menos tres lugares alternativos, el estadio Beisborama, entre ellos.
A partir del medio día del lunes, cientos de niños y sus papás abarrotaron el parque 21 de Mayo, disfrutando de la lucha libre, las princesas, los inflables y otros atractivos que marcaron su “Día del Niño”, de acuerdo al programa de festejos de los 400 años de la ciudad. Los comercios del Centro tuvieron su actividad normal.
Por la tarde del mismo lunes, López Obrador y Cuitláhuac García, con otros candidatos del partido y miles de simpatizantes, llevaron a cabo su mitin allá, en la calle 8, sin más contratiempos. AMLO declaró que regresaría a Córdoba ya como presidente electo, “a ver si así me dejan entrar”.
Córdoba, nuevamente, fue noticia nacional, por esta polémica que, como se ve, se hubiera evitado si los “morenistas locales”, tuvieran más vocación hacia el diálogo y el respeto a la ciudad, a sus habitantes, y a sus actividades programadas.