Los Ángeles.- Antes de que la embajadora de buena voluntad de las Naciones Unidas lanzara la campaña #HeForShe de igualdad de género en septiembre, alguien le pidió lo impensable: “Me motivaron a no usar la palabra feminismo porque la gente sentía que era alienante y que se alejaba la idea del discurso que era incluir a tanta gente como fuera posible”, reveló a la revista Porter.
Explicó: “Pero lo pensé largo y tendido y al final sentí que era lo correcto. Si las mujeres se sienten atemorizadas de usar la palabra, ¿cómo es que los hombres van a empezar a emplearla?”.
No temió decir lo que pensaba y ahora incluso es más abierta sobre su carrera. “He pasado más de la mitad de mi vida pretendiendo ser alguien más. Mientras mis contemporáneas se teñían el cabello y buscaban entender quiénes eran, yo pensaba en quién era Hermione y como podía interpretarla de forma correcta”, recuerda.
Como sabemos, ella junto a Daniel Radcliffe y Rupert Grint, protagonizó en los ocho filmes de Harry Potter, entre 2001 y 2011.
“Ahora a los 25 años por primera vez en mi vida siento que me siento cómoda conmigo misma. De hecho tengo cosas que quiero decir y quiero ser auténtica”, prosiguió.
“No quiero que haya una gran separación entre lo que soy en público y en privado. Es el camino más difícil de tomar, pero sin duda el más gratificante”, aclaró. En otras palabras: lo que ves es lo que hay.
“Parece ridículo, pero estoy muy interesada en la verdad, en encontrar caminos de ser desordenada e insegura y defectuosa e increíble y grandiosa y ser lo más auténtica que pueda, todo en uno. Cuando miras el trabajo de otras actrices como Emma Thompson sientes que ves algo verdadero y quiero aspirar a eso”, concluyó.