AGENCIA
Internacional.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido una alerta ante el mayor brote de ántrax en Zambia, destacando un riesgo significativo de propagación a nivel regional e internacional. A continuación, se presentan los detalles del brote y las recomendaciones de la OMS para contener la enfermedad.
Hasta el 20 de noviembre, se han registrado 684 casos humanos sospechosos de ántrax en Zambia, con un total de 4 fallecimientos. Este brote, que afecta a 9 de las 10 provincias del país, es el más extenso en la historia reciente de Zambia.
La mayoría de los casos están epidemiológicamente vinculados a casos confirmados, contrastando con los 42 casos notificados en la temporada de contagios de 2022.
El riesgo de contagio dentro de Zambia se considera alto, destacando el movimiento no restringido de animales como principal factor.
La OMS considera que el riesgo de propagación a nivel regional es alto debido al frecuente movimiento transfronterizo de animales y personas entre Zambia y sus países vecinos, como Angola, Botswana, República Democrática del Congo, Malawi, Mozambique, Namibia, Tanzania, Uganda y Zimbabue.
La propagación se ve agravada por los casos confirmados de ántrax en provincias a lo largo de los ríos Zambezi, Kafue y Luangwa, que desembocan en lagos en Zimbabwe y Mozambique, y podrían facilitar la dispersión a través de animales salvajes.
Características del Ántrax y Síntomas: El ántrax es causado por la bacteria Bacillus anthracis y afecta principalmente a rumiantes como vacas, ovejas y cabras.
El contagio en humanos ocurre al consumir productos animales contaminados o por contacto directo con animales infectados.
Los síntomas varían según el tipo de ántrax, incluyendo ántrax cutáneo, gastrointestinal y pulmonar.
Recomendaciones de la OMS: Evitar el contacto y consumo de carne de animales que hayan muerto repentinamente.
Profesionales de la salud y personas en riesgo ocupacional deben usar equipo de protección y seguir estrictas medidas de prevención y control de infecciones.
La situación actual subraya la importancia de la cooperación internacional para abordar las amenazas a la salud pública y prevenir la propagación de enfermedades infecciosas.
