AGENCIA
Internacional.- La Organización de los Estados Americanos (OEA) ha manifestado su firme respaldo a México tras el violento incidente en su embajada en Ecuador. Una resolución condenando el asalto fue aprobada en una sesión extraordinaria convocada el día de ayer, con la mayoría de los países miembros votando a favor. La propuesta fue iniciada por Colombia, denunciando la intrusión y la violencia contra el personal de la misión diplomática mexicana.
La resolución critica duramente los actos de violencia y la infracción a la integridad y dignidad del personal de la embajada mexicana. Ecuador fue el único país en oponerse a la medida, mientras México optó por no participar en la sesión. Luis Almagro, secretario General de la OEA, expresó su repudio a la invasión, enfatizando que estos eventos no deben sentar precedente.
Este incidente representa un punto crítico en las relaciones regionales, especialmente considerando las pasadas tensiones entre la OEA y el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. El asalto, capturado en video y difundido por López Obrador, mostró a la policía ecuatoriana forzando su entrada, maltratando al personal y deteniendo al exvicepresidente Jorge Glas.
La divulgación de estas imágenes incitó a una condena internacional más firme, incluyendo la del gobierno de Estados Unidos, que inicialmente había mantenido una posición moderada. Tras la difusión del video, Estados Unidos, junto con otros países que previamente habían adoptado posturas conservadoras, condenaron el acto autoritario.
AMLO, ha anunciado que presentará una denuncia formal contra Ecuador en la Corte Internacional de Justicia. Este hecho refleja la gravedad del incidente y el deterioro de las relaciones diplomáticas entre México y Ecuador.
Por su parte, el gobierno ecuatoriano justificó el asalto en la embajada, acusando a México de fomentar la impunidad al albergar a Glas, quien, según ellos, no cumple con los criterios para el asilo y no debe ser considerado un perseguido político. Alejandro Dávalos, Viceministro de Movilidad Humana de Ecuador, expresó que su país había notificado a México repetidamente sobre la situación legal de Glas, esperando una resolución que nunca llegó.
Esta tensión diplomática y la respuesta de la OEA subrayan la importancia de adherirse al respeto de la integridad de las misiones diplomáticas, resaltando la necesidad de diálogo y legalidad en las relaciones internacionales.
