Córdoba.- Reveló el cronista de la ciudad, Rafael De la Mora, que la leyenda de la ‘Mulata de Córdoba’ no es exclusiva de esta ciudad. Destacó que hay ciudades como Querétaro y Guanajuato, que tienen sus propias versiones de esta historia.
De acuerdo con De la Mora, la leyenda de la Mulata no es contada sólo en la ciudad de Córdoba, sino también en otras partes del país, teniendo todos estos relatos varios elementos en común.
Acotó que “todos hacen referencia a una mujer sumamente atractiva de quien la gente comenzó a sospechar que podía comunicarse con los espíritus, razón por la que ésta es denunciada ante las autoridades eclesiásticas y encarcelada por el Santo Oficio”.
Apuntó que el origen de esta leyenda no se puede remontar a un hecho o suceso en particular, sino que se trata de la transmisión de un rumor creado por la gente de aquella época. Señaló que dichos rumores eran normales debido a que la gente tenía mucha inquietud por lo que hacía la Inquisición. Sin embargo, acotó que pese a la cantidad de relatos y rumores que trascendieron a la actualidad bajo la forma de leyendas, casi todo lo que se dice de la Inquisición resulta una exageración. Especificó, que si bien el Santo Oficio protagoniza alguna parte de estas leyendas, la realidad es que en los 300 años que éste estuvo presente, sólo se realizaron 300 encarcelamientos y 40 autos de fe, que eran los procesos en los que algún condenado abjuraba sus pecados en público para reconciliarse con la fe católica o ser ejecutado por las autoridades civiles.
Según De la Mora, los otros relatos no implican a una mulata sino a una mujer que generalmente se mantiene al margen de la sociedad, que es reconocida por ésta o que se dedica a ayudar a la gente y curarla. Acotó que la razón por la que se implica a una mulata en la versión cordobesa, es por la tercera raíz presente en la región desde la fundación de la ciudad de los Treinta Caballeros. “Cuando los españoles conquistaron estos territorios, diezmaron a la población indígena y trajeron hasta aquí miles de esclavos africanos, mismos que a la larga empezaron a ser vistos con cierto recelo, debido a la fama que tenían por ser la causa de la fundación de la ciudad”, aclaró.
