CD. DE MÉXICO.- Los organizadores del Gran Premio de México se anticiparon a cualquier crisis para darle continuidad adecuada en un lustro, luego que los organizadores presuman que el contrato que fue firmado con Fórmula One Management y la Federación Internacional de Automovilismo, fue “bien trabajado” para evitar riesgos. Las precauciones que se tomaron para fijar límites en el tipo de cambio permitieron mantener los accesos al mismo precio que en 2015.
Además, el alza del dólar que hace poco llegó a 20 pesos no afectó en la organización este año, debido al “blindaje” que se aplicó en el acuerdo, luego de que el año pasado el dólar no llegaba a los 17 pesos. “Los precios se mantuvieron para este año, el boleto más económico cuesta mil 500 pesos y a diferencia con el año pasado se abrieron las categorías, de cierta manera el evento se volvió más accesible”, explicó Rodrigo Sánchez, Director de Marketing del GP de México.
Por otra parte, debido a los seriales que se corren en el año, el Autódromo tiene un mantenimiento cotidiano. Carreras de Fórmula E, WEC, Nascar, entre otros, mantuvieron a punto las instalaciones y sólo tuvieron que corregir detalles en el trazado.
Además, el evento que iniciará este viernes con las calificaciones es dirigido a varios sectores, no sólo en el plano deportivo sino también, la farándula, el glamour y lo gourmet, fueron el extra que decidieron incluir para este año y ofrecer una experiencia más completa al fan de la Fórmula 1. Se espera un éxito rotundo en esta segunda edición