in

La corrupción de Lavín

Superiberia

Córdoba.- Así como la Secretaría de la Función Pública obligó a Jesús Villalobos a regresar el dinero que se gastó en asuntos particulares como lo es ir al Super Bowl acompañado de 20 amigos con cargo al erario, aquí en nuestra ciudad tenemos tres ejemplos similares de corrupción, que al día de hoy tampoco han sido castigados.

En el trienio de Lavín, el regidor primero, quien por cierto también la hizo de director de Obras Públicas, Raúl Rodríguez Cánovas, hizo viajes a la ciudad de San Antonio, Texas, para según él, copiar el proyecto del famoso Paseo del Río en aquella ciudad texana y hacerlo aquí en el río San Antonio, ¡semejante sin vergüenza!, hay que ver el mugroso río que tenemos en Córdoba, después de haber pagado las vacaciones y las compras a este regidor en San Antonio, Texas, ni en el agua se parecen los ríos, ¡porque el de aquí, lleva hasta agua de caño!, lo mismo la entonces regidora cuarta, Rossana García Torio, quien se fue a París en compañía de su esposo, la entonces encargada de la Oficina de Relaciones Exteriores, Marcela Bueno Nadal, y el novio de ésta, para según ellas traer cine, y la otra es María de los Ángeles Carús García quien anda de “chapulín” al brincar de una administración a otra, quien suma ya 9 años en el municipio como directora de Turismo y un sinnúmero de viajes a Miami y Nueva Orleans, para atraer turismo a Córdoba, coincidentemente en aquellas fechas, su hija se encontraba estudiando inglés en aquella ciudad, el caso es que nunca llegaron ni los turistas, ni las producciones cinematográficas ni mucho menos el Paseo del Río.

Lo único que hicieron fue viajar con gastos pagados por los cordobeses que son los que mantienen el erario municipal; lo que es una manera de corrupción. Inventan viajes de trabajo y se van a pasear en lugar de estar en su oficina, así pues, los funcionarios se la pasan del “tingo al tango” cobrando sus sueldos mientras les pagamos, además, sus vacaciones en el extranjero, lugares que difícilmente visitan cuando son ellos quienes deben soportar los gastos.

Pero Portilla -el alcahuete de Lavín-, viendo todo esto, sigue haciéndose tonto, debe ser porque él también pagó con dinero del municipio sus viajes a la Ciudad de México con la Tesorera en su pasada administración, donde llegaba a hospedarse en el Hotel Nikko de esa ciudad, seguramente en Tierra Blanca acostumbraba a vivir con los lujos que ofrece a sus huéspedes este exclusivo hotel.

 

PARA SABER: Jesús Villalobos antes de ser director de Pronósticos Deportivos, fungió como director de finanzas del ISSSTE cuando Miguel Ángel Yunes Linares era director en esta dependencia, de donde también salió sancionado por la ASF al estar implicado en un fraude por más de 300 millones de pesos, toda una fichita este ex funcionario.

CANAL OFICIAL

Se quitan los pantalones en el Metro

El piano de Casablanca