Agencias
La Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó que las instalaciones nucleares de Irán no han sufrido daños tras un reciente ataque, presuntamente israelí, con drones. Este anuncio llega en un momento de alta tensión, donde Irán ha negado cualquier daño causado por misiles y asegura haber derribado varios drones. A pesar de la escalada, Rafael Grossi, director general del OIEA, enfatizó que las infraestructuras nucleares no deben ser objetivos en conflictos, instando a ambas partes a una extrema contención.
La situación en Irán ha provocado la movilización de cuerpos de emergencia y la suspensión temporal de vuelos en ciudades importantes como Teherán, Shiraz e Isfahán, aunque posteriormente se reanudaron. Este conflicto se intensificó después de que Irán lanzara un ataque con misiles y drones en represalia por un bombardeo israelí contra su consulado en Damasco, que resultó en la muerte de siete miembros de la Guardia Revolucionaria.
Estados Unidos ha reaccionado imponiendo nuevas sanciones a Irán, mientras que ni el gobierno de Israel ni el Pentágono han reconocido oficialmente su participación en los ataques dentro de Irán. Este complejo escenario subraya la fragilidad de la paz regional y la importancia de mantener las instalaciones nucleares fuera del alcance de las hostilidades militares.
