Kevin Sánchez, un niño de 9 años de Izcalli, ha sido seleccionado para la primera edición junior del International Air and Space Program de la NASA. En este programa, Kevin recibirá un entrenamiento básico de astronauta durante cinco días.
Kevin, quien fue reconocido por el Centro de Atención al Talento (CEDAT) a los cuatro años por su sobredotación intelectual, con un coeficiente intelectual de 138, ha expresado su emoción y felicidad por esta oportunidad única en entrevista para EL UNIVERSAL. “Estoy muy emocionado, muy contento y feliz. Quiero estudiar sobre el espacio porque me ha gustado todo eso de cómo es el espacio y la Tierra. Me he estado preparando mucho para todo esto”, dijo Kevin.
A pesar de su corta edad, Kevin muestra una madurez fuera de lo común, según los expertos del CEDAT, quienes señalan que su desarrollo neuronal es mayor a nivel de la corteza frontal temporal, la frontal orbitaria e hipocampal, y las áreas 1 y 3 de Brodmann (motrices).
Sin embargo, la noticia de su aceptación al programa ha traído consigo gastos inesperados para Kevin y su familia, como vuelos y hospedajes. Actualmente, están recaudando fondos para cubrir estos gastos y que Kevin pueda asistir al programa en Houston, Texas, del 28 de julio al 2 de agosto.
Para Kevin, esta será su primera experiencia viajando en avión, y además de recibir entrenamiento en astronauta, está mentalizado para hacer paracaidismo indoor en un tubo de viento y caminar bajo el agua utilizando un traje especial que le proporcionarán los organizadores en colaboración con la NASA.
“Estoy muy agradecido con mis papás que me dan su apoyo para lograr mi sueño. Y para los niños, no tengan miedo, que se atrevan y se preparen para lograr lo que quieren”, declaró Kevin, quien actualmente está estudiando el cuarto grado de primaria, aunque debería estar en tercero, debido a su capacidad intelectual. Su materia favoritas son historia, geografía y matemáticas, y le gusta hacer ejercicio en los aparatos de un parque cercano a su casa, así como jugar fútbol y básquetbol.
Kevin es un ejemplo de cómo la determinación y el apoyo familiar pueden llevar a cumplir los sueños, incluso a una edad temprana. Su historia inspira a otros niños a perseguir sus metas y a no tener miedo de soñar en grande.