Fortín de las Flores.- El bulevar que ahora Carlos Junco, motivado por su ambición, ha convertido en un mercado, es la misma carretera federal que une el Sureste del país con el centro, es la vía que utilizan miles de ciudadanos todos los días para desarrollar su vida económica, social, pública, etcétera, sin importarle al Alcalde que el obstruir las vías de comunicación es un delito y puede esto ser de consecuencias graves si una emergencia ocurriera un miércoles de tianguis en Fortín.
¿Cuánto se estarán embolsando Junco y su director de Comercio para permitir lo que se vive cada miércoles en este municipio, además de lo que se están robando con este famoso diezmo que piden a sus constructoras amañadas?
¡Junco renuncia, harías un bien a Fortín! retírate junto a Torrecilla que fue quien tuvo el desacierto de invitarte como suplente, no tienen por qué cargar contigo los fortinenses, esos que en su mayoría desearían verte juzgado junto a César Torrecilla.
Estos comerciantes que ni impuestos pagan, pero que se llevan una importante derrama económica a sus ciudades de origen, entre ellas Puebla, de manera desafiante le contestaron a nuestro reportero que ellos pagaban al Ayuntamiento para poder instalarse allí y que era mejor dejarlos trabajar vendiendo en las banquetas aunque desquicien la circulación, que andar robando o asaltando, así que mientras a Junco se le inflan sus bolsillos, los ciudadanos de Fortín y Córdoba pierden hasta una hora tratando de circular en este vergonzoso bulevar.