El regreso de Julio César Chávez Jr. al ring de boxeo la noche del sábado en Tampa, Florida, fue un evento que despertó una mezcla de emociones entre los aficionados. Los abucheos se escucharon con fuerza cuando se anunció la decisión de los jueces y continuaron durante la entrevista en el ring. El hijo de la leyenda del boxeo mexicano, a pesar de la recepción negativa, mostró una notable resiliencia al retornar después de 31 meses de inactividad.
A sus 38 años, Chávez Jr. derrotó a Uriah Hall, de 39, en una pelea de seis asaltos que careció de grandes emociones en la cartelera del evento encabezado por Jake Paul vs. Mike Perry. Los jueces dieron el combate en favor de Chávez Jr. con puntuaciones de 58-56, 59-55, y 59-55, reconociendo su esfuerzo en un momento en que su carrera parecía haber llegado a su fin debido a largos periodos de inactividad, problemas de depresión, y una reciente acusación por posesión ilegal de armas.
Un Regreso Meritorio
La presencia de Chávez Jr. en el ring fue significativa considerando su situación previa. Apenas cinco semanas y media antes, el mexicano se encontraba en una Corte de Los Ángeles. Además, había estado participando en un programa de rehabilitación por adicciones en Los Ángeles, lo que dejó claro que no solo estaba trabajando en su condición física, sino también en su salud mental.
El sábado, Chávez Jr. mostró un físico fuerte, reflejando su dedicación en los meses previos a la pelea. Sin embargo, su desempeño en el ring dejó mucho que desear. Su oponente, Uriah Hall, es un peleador de artes marciales mixtas con solo una pelea de boxeo en su historial, la cual ganó en 2022 contra Le’Veon Bell, exjugador de la NFL.
La Estrategia en el Ring
“Es fuerte, pero una vez que agarré mi distancia, boxee cada round porque estuve tres años fuera. Es un gran competidor, pero gané fácil”, dijo Chávez Jr. en el ring mientras era entrevistado entre abucheos. “Sé que la gente esperaba una guerra, pero contra un tipo que no es boxeador, con tres años fuera, usé mi jab, mi distancia, sin muchos golpes”, explicó.
La Mirada en Jake Paul
Chávez Jr., con un récord de 54-6-1, mencionó que su enfoque durante los primeros rounds fue golpear el cuerpo de Hall, lo cual consideró clave para su victoria. Al ser interrogado por el reportero de DAZN sobre su próximo objetivo, Chávez Jr. expresó su deseo de pelear contra Jake Paul, quien más tarde noqueó a Mike Perry en seis rounds.
Al preguntarle si creía que podía vencer a Paul, Chávez Jr. se mostró reservado pero confiado: “Soy mejor peleador que sus oponentes. Eso es seguro”. Más tarde, en una conversación con un reportero de ESPN Deportes, Chávez Jr. admitió que su pelea fue precavida y que se encontraba a un 60-70 por ciento de su capacidad total. “No me arriesgué a que me golpeen. Me sentí muy bien, mis piernas funcionaron bien, mis movimientos exactamente bien. No di el espectáculo al público que quería”, dijo Chávez Jr. “Imagínense a un cien por ciento, todavía puedo competir, yo pienso que eso es lo que demostré, ¿no?”.
Noche de Éxitos en el Boxeo Femenino
En la pelea coestelar de la noche, la legendaria boxeadora puertorriqueña Amanda Serrano noqueó con facilidad a Stevie Morgan en el segundo round, preparando el terreno para una esperada revancha contra la irlandesa Katie Taylor en noviembre, un combate que aún está por pactarse.
El retorno de Julio César Chávez Jr. puede no haber sido el espectáculo que muchos esperaban, pero sin duda marcó un capítulo de superación y resiliencia en su vida y carrera. Ahora, con la mirada puesta en futuros combates, el hijo de la leyenda buscará demostrar que todavía tiene mucho que ofrecer en el mundo del boxeo.