En un revés para la Administración de Donald Trump, un juez federal impidió este lunes que se lleven a cabo arrestos de migrantes indocumentados en ciertos lugares de culto pertenecientes a la comunidad cuáquera, bautista y sij. La decisión surge como respuesta a la revocación de un memorando emitido durante la presidencia de Joe Biden (2021-2025) que prohibía los arrestos migratorios en áreas sensibles como iglesias y escuelas.
El fallo, emitido por el juez Theodore Chang, del estado de Maryland, concede una medida cautelar a grupos religiosos que impugnaron la política migratoria de Trump. La orden judicial solo se aplica a los lugares de culto que son propiedad de las organizaciones demandantes, entre ellas la Sociedad Religiosa de los Amigos, una agrupación de congregaciones cuáqueras con un fuerte compromiso pacifista en la costa este de Estados Unidos.
También se verán protegidos el Templo Sij de Sacramento y la Asociación Cooperativa Bautista, una organización cristiana evangélica con sede en Georgia.
El decreto de Trump, emitido el 21 de enero como parte de su estrategia para reforzar las deportaciones masivas, eliminó las “áreas protegidas” establecidas por la Administración de Biden y permitió a las autoridades migratorias llevar a cabo redadas en hospitales, escuelas e iglesias. Sin embargo, la decisión del juez Chang representa un obstáculo en la implementación de esta medida, al menos en los lugares de culto de los grupos que presentaron la demanda.
Esta resolución es vista como una victoria parcial para los defensores de los derechos de los migrantes, quienes han denunciado que la eliminación de las áreas protegidas pone en riesgo a miles de familias indocumentadas en Estados Unidos. Se espera que el gobierno de Trump apele la decisión, lo que podría abrir una batalla legal prolongada en torno a la protección de los migrantes en espacios religiosos y educativos.
