Orizaba.- Desde 2013, unos 15 jóvenes invidentes siguen en el intento de ingresar a la Universidad Veracruzana, porque la institución no tiene modelos educativos para la inclusión de estudiantes con discapacidad, ello desde la etapa del examen de admisión hasta las clases que imparten los catedráticos.
El presidente de la Asociación de Invidentes y Deficientes Visuales, Leonardo Javier Gutiérrez Tamayo, indicó lo anterior y dijo que se violenta la Ley 822 para la Integración de las Personas con Discapacidad del Estado de Veracruz, que fue aprobada desde 2010.
Lamentó que aunque dicha Ley obliga a las dependencias gubernamentales, instancias educativas y del sector Salud, a tener infraestructura, condiciones y programas para incluir a las personas con discapacidad visual, auditiva y motriz, entre otras, no todas cumplen y ejercen un tipo de discriminación hacia este sector. Resaltó que pese a que en enero de este año la UV acordó con asociaciones civiles del Estado de Veracruz, acciones a favor de estudiantes con discapacidad a través del Programa Universitario para la Inclusión e Integración de Personas con Discapacidad (PIIP), en la región Córdoba-Orizaba no se ha visto algo
al respecto.
Gutiérrez Tamayo mencionó que prueba de ello es que los 10 aspirantes solicitaron a la UV un sinodal para poder presentar el examen de admisión por escrito en mayo, no obtuvieron respuesta y por lo tanto por su condición no pudieron presentarlo para intentar ingresar a cursar una carrera universitaria.
“Hubo jóvenes con la preparatoria terminada y con buen promedio que se quedaron sin la oportunidad de ingresar a una carrera profesional, y todo porque la Universidad Veracruzana no les envió los documentos para que pudieran presentar el examen de admisión, una prueba sólo diseñada para las personas que sí ven. No hay exámenes en Braille, ni sistemas de computación lectores de textos aptos para los aspirantes con discapacidad visual”, expresó.
Agregó que para solucionar la falta de oportunidades de estudios profesionales para los invidentes, la Asociación se ha dedicado a buscar convenios con las universidades privadas de la ciudad, sin embargo, lamentó que no han tenido buena respuesta, salvo el recién acuerdo firmado con la Universidad del Conde, el cual consiste en educación en línea con cuotas mensuales de
500 pesos.