AGENCIA
Nuevo León.- La multinacional estadounidense John Deere, especializada en maquinaria agrícola y de construcción, ha confirmado la apertura de su primera planta en México dedicada exclusivamente al sector de la construcción, con una inversión inicial de 55 millones de dólares. La nueva instalación estará ubicada en el estado de Nuevo León y comenzará operaciones en 2026, como parte de una estrategia para diversificar su producción y aprovechar el auge del nearshoring en el país.
La planta se enfocará principalmente en la fabricación de minicargadores de orugas y minicargadoras de neumáticos, equipos compactos que están ganando popularidad en América Latina, aunque su mercado sigue siendo pequeño en comparación con Estados Unidos. En América Latina se estima que el mercado actual de estos equipos es de 4 mil unidades anuales, frente a las 100 mil unidades vendidas en el mercado estadounidense. Sin embargo, la empresa confía en que este sector experimentará un crecimiento sostenido gracias al dinamismo del mercado mexicano.
“Vemos a México como un mercado atractivo”, destacó Gecimar Morini, gerente divisional de John Deere para México, Centroamérica y el Caribe. “Por eso estamos invirtiendo en la expansión de nuestros distribuidores y en nuevos territorios. Con el nearshoring y todo lo que el país ofrece, la oportunidad a largo plazo es muy amplia”, añadió.
Este anuncio de expansión llega en un contexto político delicado, debido a las amenazas del político republicano Donald Trump, quien en septiembre pasado advirtió que, si John Deere trasladaba parte de su producción fuera de Estados Unidos, impondría un arancel del 200% a la empresa. Esta amenaza fue lanzada después de los despidos en plantas de Iowa, pero la compañía ha mantenido su plan de inversión en México, enfocándose en el desarrollo a largo plazo en sectores clave, independientemente de los cambios políticos.
“Nuestro enfoque está en la infraestructura y el crecimiento regional”, señaló Morini, refiriéndose a la importancia de México como un centro estratégico para la expansión de John Deere.
México es actualmente el segundo mayor consumidor de equipos de construcción en América Latina, un sector que ha crecido un 76 por ciento (%) desde 2022, impulsado por los proyectos gubernamentales y privados en infraestructura. Además, la cercanía al mercado estadounidense y las ventajas competitivas en costos, logística y acuerdos comerciales hacen de México un punto clave para la producción y distribución de maquinaria en la región.
Ventajas del nearshoring y potencial de exportación son otras razones que motivan a John Deere a continuar invirtiendo en el país, lo que le permitirá atender no solo el mercado mexicano, sino también otros mercados de América Latina y más allá.
La estrategia de John Deere en México sigue el modelo de éxito que la empresa implementó en Brasil hace una década, donde comenzó con una sola línea de producción y, con el tiempo, amplió su capacidad a cinco líneas y centros de capacitación tecnológica. Morini señaló que espera replicar este modelo en México, asegurando que el éxito de Brasil puede servir como base para este nuevo proyecto en territorio mexicano.
“En Brasil, hasta hace seis meses no había nada aquí, y ahora incluso estamos construyendo un centro de capacitación tecnológica. Lo mismo se espera para México”, concluyó Morini.
Con esta nueva planta, John Deere no solo diversifica su producción, sino que también refuerza su presencia en México, donde ya opera otras tres instalaciones enfocadas en el sector agrícola. Este paso consolidará a México como un socio estratégico para la empresa en su expansión global, beneficiando tanto al mercado local como a la exportación hacia otras regiones.