El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dado un paso contundente en el ámbito migratorio con la firma de una orden ejecutiva que restringe temporalmente el acceso al asilo en la frontera sur con México. En un mensaje dirigido a la nación, Biden acusó a los republicanos de convertir la frontera “en un arma”, señalando que el tema migratorio no debería ser utilizado como un instrumento político.
La orden ejecutiva establece que el acceso al asilo en la frontera se limitará temporalmente cuando el número de cruces irregulares supere los dos mil 500 diarios durante un período de siete días. Esta medida busca desalentar los cruces irregulares y promover la solicitud de asilo por vías legales antes de cruzar desde México.
En su discurso, Biden enfatizó la importancia de trabajar en colaboración con México en lugar de adoptar un enfoque hostil. Destacó su relación con el presidente Andrés Manuel López Obrador y expresó su disposición a trabajar de manera conjunta con la próxima presidenta electa, Claudia Sheinbaum.
El presidente estadounidense reconoció la necesidad de reformar las leyes migratorias y fortalecer los recursos en la frontera, incluyendo la incorporación de más jueces migratorios, agentes y tecnología.
Biden también hizo hincapié en su compromiso de no separar familias y en su búsqueda continua de una reforma migratoria integral. Su enfoque contrasta con el tono y las políticas migratorias de la administración anterior, representando un cambio de rumbo significativo en la política migratoria de Estados Unidos.