Japón, 5 de julio – En una sorprendente conferencia organizada por la Universidad de Kioto, la Corporación Kajima presentó un ambicioso proyecto que ha dejado boquiabiertos a muchos: la construcción de una estructura gigante en la Luna llamada “The Glass”, que girará cada 20 segundos para emular la gravedad de la Tierra.
El objetivo de este innovador proyecto es replicar las condiciones de vida de la Tierra en la Luna, incluida la gravedad, que es significativamente menor en nuestro satélite natural. Para lograr este desafío, la Corporación Kajima ha ideado un sistema que utilizará fuerza centrífuga para generar una gravedad similar a la terrestre en la superficie lunar.
“The Glass” es un proyecto a largo plazo, con una duración aproximada de 100 años. Aunque es posible que nunca lleguemos a presenciar la realización completa del proyecto debido a los riesgos y dificultades de construcción en la Luna, se espera que una versión a pequeña escala y más simple esté presente en nuestro satélite para el año 2050. Sin embargo, la esperanza para llevar a cabo el proyecto reside en tecnologías futuras que puedan superar los desafíos actuales.
La gravedad artificial es el núcleo del proyecto, siendo la base para la construcción del edificio que girará sobre su propio eje para generar una gravedad similar a la de la Tierra. “The Glass” estará dividido en diferentes espacios para albergar a los habitantes de este edificio lunar, brindándoles condiciones de vida similares a las que experimentan en nuestro planeta.
Aunque las expectativas son enormes, también lo son los riesgos involucrados en este ambicioso proyecto. Hasta el momento, no se han revelado detalles sobre cómo se llevará a cabo la construcción en la Luna, pero se ha indicado que la corporación también tiene en sus planes abarcar futuros proyectos en Marte.
Este proyecto representa un salto significativo en el ámbito de la exploración espacial y la vida en otros cuerpos celestes. La posibilidad de crear gravedad artificial en la Luna abre un mundo de oportunidades para la investigación científica y la potencial colonización humana en otros lugares del Sistema Solar. Aunque los retos son desafiantes, “The Glass” promete ser un paso hacia el futuro de la humanidad en el espacio exterior.