En un reciente comunicado emitido en hebreo, el ejército israelí ha anunciado el inicio de una “operación terrestre limitada” en el sur de Líbano. Este despliegue tiene como objetivo atacar posiciones de la organización terrorista Hezbollah, así como sus infraestructuras en varias aldeas cercanas a la frontera con Israel.
El anuncio, realizado en la mañana del martes, hora local, destaca que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han llevado a cabo esta acción en respuesta a lo que consideran una “amenaza inmediata y real” para los asentamientos israelíes en la frontera norte. Las operaciones se centran en neutralizar las capacidades de Hezbollah, un grupo armado que ha sido considerado por Israel como un adversario significativo en la región.
Este desarrollo se produce en un contexto de creciente tensión en el Medio Oriente, donde las interacciones entre Israel y Hezbollah han llevado a una escalada de conflictos en el pasado. La operación terrestre está diseñada para ser precisa y enfocada, buscando limitar el impacto en la población civil mientras se enfrentan a las amenazas planteadas por el grupo libanés.
Las autoridades israelíes han instado a la población a mantenerse informada sobre la situación y han reforzado la seguridad en las comunidades cercanas a la frontera, preparándose para cualquier eventualidad. Mientras tanto, la comunidad internacional observa de cerca la evolución de esta situación, que podría tener repercusiones significativas en la estabilidad regional.
