México,D.F.- Seguir a la Selección se ha convertido en un estilo de vida para un grupo de aficionados mexicanos que se encuentran en Brasil.
Luego de acompañar a la Selección Mexicana a Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, los miembros del grupo denominado Sigo al Tri, planearon su viaje a Brasil por cuatro años, aun sin tener la certeza de que el equipo acudiría.
Luis Espinosa, fundador del grupo, platica que la planeación se llevó a cabo desde el día que regresaron de Sudáfrica 2010.
“Sabíamos que aún faltaban cuatro años pero ya empezábamos a revisar las sedes, algunos datos y costos. Dos años antes ya teníamos parte del ahorro mundialista y a un año esperábamos solamente que FIFA anunciara las fases de ventas de entradas y también que las aerolíneas habilitaran vuelos para 2014”, comenta desde Brasil.
Gracias a la planeación que realizaron con anticipación y a que también acudieron a la Copa Confederaciones de 2013 para conocer más la sede, el viaje completo para seguir al Tri les costó cerca de 75 mil pesos.
“Mucho depende la forma de viajar y gasta de cada fan ya que se puede elevar o disminuir ese gasto. El ‘paquete’ lo armamos por nuestra cuenta, no necesitamos de ninguna agencia para reservar vuelos u hospedaje, tampoco para las entradas a partidos”, añadió.
El grupo de Sigo al Tri aprovecha las redes sociales para mantener comunicación entre todos los aficionados que viajan, organizar convivios, enviar tips y estar informados de cómo aprovechar cada una de las sedes.
Sobre las diferencias que han encontrado entre Brasil y las dos sedes mundialistas anteriores, Espinosa opina que aunque la gente es muy hospitalaria, han tenido que sobreponerse a altos precios y problemas de transporte.
“En Alemania 2006 y Sudáfrica 2010 recibimos muchísimas guías en cualquier lugar, desde aeropuerto hasta plazas comerciales. Este tipo de información es esencial para la comodidad de los fans y no la hemos visto. La señalización del Mundial en las calles es pobre, el transporte público no es bueno, tampoco es buena la señalización, la mayoría de los artículos en tiendas son muy caros a comparación de los precios que tienen en México”, comentó.
El grupo de aficionados ya se encuentra en Recife para el último juego de la Selección Mexicana y donde definirán si continuarán en Brasil para los octavos de final, aunque si regresan lo harán con la mira puesta en Rusia 2018.
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