CÓRDOBA.-Por presunto actos de corrupción, violaciones a la norma y hasta amenazas, auditores del Instituto Mexicano del Seguro Social en la Delegación Veracruz Sur, realizan una minuciosa investigación en la jefatura de prestaciones médicas a cargo de Carlos Alberto Flores Aguilar, considerado por muchos empleados como “el peor y más sinvergüenza titular que ha tenido el área”.
Los quejosos afirman que Flores Aguilar es parte de los corruptos funcionarios del IMSS que dejó enquistados el ex delegado, Jorge Tubilla Velasco, quien además de dejarle el puesto, le endosó además a Adriana Alfaro Muñoz, con quien sostiene un amasiato.
Con base en la información proporcionada por propios trabajadores del Instituto, “Charly” Flores, como se le conoce al interior, trata con soberbia y desprecio al personal, pero también a los derechohabientes, a quienes abandona a su suerte, mientras él se dedica a realizar constantes viajes con dinero que obtiene de sus corruptelas.
Afirman que la doctora Celida Duque, la nueva delegada en el Sur de Veracruz, es una mujer honesta que llegó a “fumigar a las ratas”, quienes favorecen con servicios subrogados a proveedores plenamente identificados, quienes pagan comisión a los funcionarios que “les mandan clientes”.
Los auditores investigan casos en los que al parecer, con complicidad de empleados de afiliación, dan de alta a pacientes con enfermedades graves y costosas, que, bajo la autorización de Flores, recibían atención de forma privada y los orienta(ba) para darse de alta en el IMSS para que esta noble institución pague fuertes cantidades de dinero por la atención de esos enfermos.
Se congratularon por la decisión y mano firme de la doctora Celida Duque Molina, a quien no le tiembla la mano para actuar en contra de los corruptos funcionarios, acciones que le han valido amenazas de muerte y que la obligaron a solicitar guardias personales que la acompañan a todos lados. La investigación también se extiende a la subdelegación en Córdoba a cargo de Antonio Berdeja Rivas, Eduardo Sánchez Montanaro, jefe de servicios administrativos y de Norberto Galván Valentín, del área de prensa, todos ellos incorporados en tiempos de Jorge Tubilla Velasco.