AGENCIA
EEUU.- Una serie de inundaciones provocadas por semanas de intensas lluvias en Iowa obligaron a residentes de diversas localidades a abandonar sus hogares, mientras que gran parte de Estados Unidos enfrentaba el desafío de una excepcional ola de calor el sábado.
En Rock Valley, Iowa, con una población de aproximadamente cuatro mil 200 habitantes, las sirenas resonaron a las 2:00 horas, instando a cientos de residentes a evacuar debido a que el río Rock no pudo contener las intensas precipitaciones. El alcalde Kevin Van Otterloo señaló que un helicóptero estatal se dirigía para brindar asistencia, pero la operación se suspendió cuando botes lograron acceder a los residentes atrapados. “Ha llovido mucho”, dijo Van Otterloo. “Tuvimos 10 centímetros de lluvia anoche en hora y media. Nuestro suelo ya no puede absorber más”.
La Gobernadora de Iowa, Kim Reynolds, declaró estado de desastre en 21 condados, incluyendo Sioux, que abarca a Rock Valley. Imágenes captadas por drones mostraron la ciudad sumergida bajo el agua, con techos y copas de árboles emergiendo por encima del nivel del agua.
Mientras tanto, otras regiones de Estados Unidos enfrentaban altas temperaturas y humedad persistentes. El Servicio Meteorológico Nacional reportó que aproximadamente 15 millones de personas estaban bajo advertencia de calor, mientras que otros 90 millones estaban bajo alerta, reflejando días de temperaturas excepcionalmente altas.
El año pasado, Estados Unidos experimentó el mayor número de olas de calor desde 1936, contribuyendo a más de dos mil 300 muertes relacionadas con el calor, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Las temperaturas pronosticadas superarían los 37.8 grados Celsius en ciudades como Washington, D.C., Richmond, Virginia, y Filadelfia, Pennsylvania.
En California, las condiciones eran igualmente severas, con temperaturas proyectadas hasta los 41.1 grados Celsius en el Valle Central, lo que llevó al Servicio Meteorológico Nacional a emitir una alerta de calor. En Sacramento, casi cuatro mil hogares y negocios se quedaron sin electricidad durante menos de una hora debido a cortes relacionados con tormentas.
Las inundaciones también afectaron el sureste de Dakota del Sur y el noroeste de Iowa, donde varias carreteras fueron cerradas y plantas de tratamiento de aguas residuales perdieron energía en ciudades como Hawarden y Spencer. En Minnesota, localidades como Windom luchaban con inundaciones repentinas que obligaron a erigir barricadas, aunque muchas de estas quedaron sumergidas bajo el agua poco después de ser colocadas.
En Nuevo México, fuertes lluvias y alertas de inundaciones repentinas provocaron evacuaciones obligatorias y la apertura de refugios para los residentes afectados en áreas como Las Vegas y comunidades cercanas a Albuquerque. En Ruidoso, los residentes desplazados por incendios forestales podrían regresar pronto, aunque las autoridades instaron a prepararse para condiciones difíciles durante la recuperación.
