En un audaz intento de robo, un grupo de personas armadas trató de sustraer dinero de una caja de seguridad de la empresa transportadora de caudales Britimp Seguridad en Asunción, Paraguay. El hecho, que incluyó el secuestro de tres personas durante al menos tres horas, fue frustrado gracias a la activación de protocolos de seguridad, según informó la Policía Nacional.
Un plan meticuloso, pero fallido
El director de Investigación de Hechos Punibles de la Policía Nacional, Marcelino Espinosa, relató en la radio ABC Cardinal que los asaltantes tenían como objetivo una bóveda con “un monto importante de dinero.” El grupo armado comenzó su operación irrumpiendo en la casa del gerente de la empresa en San Lorenzo, a 15 kilómetros de Asunción. Fingiendo ser agentes de la ley realizando un allanamiento, secuestraron al gerente y a su esposa.
Posteriormente, se dirigieron al centro de monitoreo de Britimp Seguridad, donde tomaron como rehén al jefe de operaciones de la empresa. Con los tres secuestrados, los asaltantes se movilizaron hasta la casa de seguridad de la empresa en Asunción.
En un intento por intimidar a los guardias, realizaron entre 20 y 30 disparos contra el portón de entrada. “El objetivo era llegar hasta la bóveda, que tiene un sistema de doble seguridad donde dos personas deben abrirla al mismo tiempo”, explicó el fiscal Federico Leguizamón.
La activación de protocolos frustró el asalto
Pese al nivel de organización del grupo armado, los protocolos de seguridad activados por la empresa evitaron que los asaltantes lograran su cometido. Tras fallar en su intento de abrir la bóveda, el grupo liberó a los rehenes.
El incidente ha generado preocupación en la comunidad por el nivel de violencia y sofisticación del intento de robo. Las autoridades continúan investigando para identificar y detener a los responsables de este fallido pero alarmante ataque.