Informes de la inteligencia de Estados Unidos indican que el Príncipe Mohamed bin Salman, heredero al trono, aprobó el plan para capturar y matar al periodista Jamal Khashoggi, mismo que fue asesinado brutalmente en 2018 en la ciudad de Estambul.
Khashoggi, un residente en Estados Unidos que escribía columnas de opinión para el Washington Post críticas con las políticas del príncipe heredero, fue asesinado y desmembrado por un equipo de agentes vinculados al gobernante en el consulado del reino en Estambul.