Córdoba.- El retén que se instaló desde hace varios meses antes de llegar a la comunidad 20 de Noviembre, obliga a los vehículos a desviarse invadiendo el carril contrario, lo que puede provocar en cualquier momento un accidente, ya que por tratarse de una curva los conductores no tienen la suficiente visibilidad para maniobrar.
La guardia la ubicó el Mando Único para revisar a los taxistas; sin embargo, según los propios “reyes del volante” no revisan nada, solamente les preguntan a dónde se dirigen; además, en la mayoría de este tipo de retenes se observa a los policías checando sus celulares en lugar de estar vigilando qué clase de unidad y personas pasan por la zona.
Por el lugar circulan autos que vienen de La Luz Francisco I. Madero y 20 de Noviembre o van al Centro de Córdoba. La mayoría de las personas ya conoce este retén, por eso disminuyen su velocidad, pero existe uno que otro despistado que viene confiado y pasa rápido.
Lo recomendable es que por lo menos 100 metros antes existan señalizaciones que indiquen del retén. Cuando pasan autobuses en ambas direcciones uno de ellos tiene que orillarse para evitar chocar, mientras los motociclistas son los que más peligran porque deben esquivar los vehículos.