Sandra González
Orizaba.- Helkyn Enríquez Báez, vocero diocesano, destacó que la violencia en nuestro estado no se limita a un solo grupo, sino que es generalizada. Su preocupación radica en que la violencia afecta a todas las edades y sectores, generando inquietud y zozobra en las comunidades.
“La violencia no se concreta en un solo grupo, es generalizada y en nuestro estado se sigue manifestando que existe, aunque de repente se quiera negar. Ataca a todos; lo hemos visto en niños, jóvenes, adultos y en distintos gremios. Ustedes mismos (los periodistas) han sufrido también este tipo de expresiones”.
Báez subrayó que la negación de la violencia no hace más que empeorar la situación. La inseguridad se manifiesta a todos los niveles sociales, impidiendo que las personas se sientan seguras al caminar por las calles, especialmente en ciertas horas o lugares. Este ambiente, tenso y poco seguro, indica que el estado aún enfrenta fuertes desafíos en la construcción de una sociedad pacífica y segura.
La llamada de atención del vocero diocesano resalta la necesidad de acciones concretas y colaborativas para abordar la inseguridad, protegiendo así a las familias y restaurando la paz en nuestras comunidades.
