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Tabasco.- La violencia en Tabasco ha alcanzado niveles alarmantes hoy, con una serie de incidentes que incluyen homicidios y actos de vandalismo que evidencian la creciente inseguridad en la región.
El día comenzó con el asesinato de un guardia de seguridad y otro individuo en el bar La Bikina, ubicado en el municipio de Comalcalco, un hecho que refleja la brutalidad del entorno. Más tarde, en el municipio de Centro, que incluye a la capital, Villahermosa, se halló el cuerpo sin vida de un joven bajo un puente, acompañado de una cartulina, un mensaje común del crimen organizado.
A mediodía, la violencia cobró otra víctima: Carlos Haddad López, sobrino de un prominente político local y expresidente del PRI estatal, fue asesinado en su hogar en Cárdenas. En este ataque, su esposa también resultó herida y falleció al llegar al hospital, según informes no confirmados.
Los actos violentos no se limitaron a homicidios. En un intento de incendio, dos hombres en motocicleta intentaron prender fuego a una gasolinera en la carretera Villahermosa-Luis Gil Pérez, aunque el personal logró extinguir las llamas antes de que se propagaran.
Por último, en la ranchería Anacleto Canabal, se reportó el asesinato de una joven de 22 años en un gimnasio, dejando claro que la violencia en Tabasco no distingue entre géneros ni lugares. La situación actual exige una respuesta urgente de las autoridades para restaurar la seguridad en la región.
