Córdoba.- El problema de la inseguridad siempre ha imperado en la zona, aunque en los últimos meses ha ido a la alza ante la falta de empleos, así como a consecuencia de una sociedad segregada, desunida y falta de compromiso, reconoció el vicario de la catedral de la Inmaculada, Concepción, Guillermo Deceano Cobos.
Al celebrar la eucaristía en la que participaron los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública quienes acudieron a recibir la bendición de Dios para que los proteja durante el desempeño de sus funciones, el presbítero comentó que los gendarmes al hacer un trabajo de riesgo, se debe elevar una oración por ellos para que el Señor los cuide.
En este sentido, refirió que desde la llegada del Mando Único a la región se ha ido aminorando la inseguridad, aunque aún se deben redoblar esfuerzos desde la familia, autoridades y cuerpos de seguridad, para que se garantice un clima de paz y seguridad que tanto demandan los ciudadanos.
En entrevista, mencionó que la suma de esfuerzos engloba a toda la sociedad, ya que para obtener mejores resultados es indispensable que la sociedad denuncia y no se quede callada, para que así las autoridades puedan actuar de forma rápida, a la par que se debe mantener la vigilancia en las colonias y en las zonas que más lo necesitan.
Aunque, lamentó que muchas veces se deja a que crezca la inseguridad porque la gente se ha ensimismado en sus problema y se ha olvidado de estar al pendiente de su propia familia y de la gente con la que convive, como son sus vecinos.
“Levantamos la voz”
Del otro lado de la moneda, detalló que aún imperan las violaciones a los derechos humanos cometidos por los policías, por eso levantamos la voz para que la autoridad garantice la confianza y la tranquilidad a la población.
Por esa razón, el Vicario de la Catedral de la Inmaculada Concepción, conminó a que las autoridades continúen destituyendo a los elementos que reprueban los exámenes de control y confianza, para que a través de está purificación se queden en la corporación todos aquellos policías que garanticen la protección a los ciudadanos.
Para que todos juntos luchemos por lograr un estado de paz en el país, es necesario que las diversas asociaciones religiosas se sumen a esta lucha para que todos junto puedan trabajar por alcanzar la tranquilidad, justicia y bienestar social.
Tomado de Observatorio Veracruzano