AGENCIA
Nacional.- La inflación en México, registrada en enero de 2024 con un aumento del 0.89 por ciento (%), está generando un impacto significativo en el costo de vida de los trabajadores en la Ciudad de México, particularmente en aquellos que dependen de las cocinas económicas y loncherías para su alimentación diaria.
Los precios de los alimentos básicos, especialmente frutas y verduras, han experimentado un notable aumento en las últimas semanas. Por ejemplo, el jitomate, un producto esencial en la cocina mexicana, ha aumentado un 52% en enero, mientras que la cebolla ha subido un 20.1%. Este encarecimiento ha llevado a muchos establecimientos a aumentar el precio de sus platillos, con aumentos que oscilan entre el 20 y el 30%.
Lucero Rodríguez, trabajadora de la cocina ‘La Bomba de Lerma’, lamenta que el aumento de precios haya afectado tanto a sus clientes como a sus propinas. A pesar de ello, algunos establecimientos, como la cocina ‘Candy’, se resisten a subir sus precios por temor a perder clientes, aunque el aumento en los costos de los productos básicos esté afectando sus ganancias.
Para mantener a sus clientes y minimizar pérdidas, los propietarios de las cocinas económicas han implementado diversas estrategias. Algunos ofrecen extras en sus platillos, como hotcakes gratuitos en los desayunos completos, mientras que otros se han registrado en aplicaciones de entrega de comida a domicilio, como Uber Eats, para expandir su negocio.
Además, se están utilizando estrategias innovadoras como el trueque, donde los propietarios de las cocinas cambian comida por frutas y verduras con los proveedores locales. Esta práctica ayuda a mantener los precios estables y a evitar un aumento significativo en el costo de los platillos.
A pesar de los esfuerzos por mantener los precios bajos, algunos propietarios reconocen que puede ser inevitable subir los costos en el futuro cercano. Sin embargo, están buscando formas creativas de mitigar el impacto de la inflación en sus negocios y en el bolsillo de sus clientes.
