Orizaba.- Tremendo susto y pánico causó el incendio de un automóvil particular que quedó reducido a chatarra luego de incendiarse cuando circulaba sobre la calle real, justo frente a un restaurante de mariscos, esto la tarde de ayer.
El primer reporte de los elementos de Bomberos fue que el incendio dio inicio porque en la cajuela de la unidad iban dos cilindros de gas conocidos como “marranitas” y una presentaba fuga y aparentemente alcanzó el escape, causando el incendio.
Debido al intenso fuego y a las llamas que alcanzaban varios metros de altura, los mismos peatones y posteriormente policías municipales, suspendieron la circulación de vehículos en la Poniente 7, en ambos carriles para evitar una tragedia mayor.
De los hechos, resulta que ayer a las 15:40 horas, un hombre iba a bordo de un automóvil Century color azul marino, con placas de circulación 715-NPY del Distrito Federal, circulaba sobre el carril de subida en Poniente 7 entre Sur 18 y 20.
Aparentemente iba hacia Río Blanco a donde llevaría dos cilindros de gas, pero no se percató de que uno presentaba una fuga, lo cual hizo que el hidrocarburo alcanzara el tubo de escape, dando inicio el incendio de la unidad.
La llamas salían de la cajuela, por lo que el conductor al darse cuenta detuvo su unidad a la altura de un restaurante de mariscos casi al llegar a Sur 20 y posteriormente se dio a la fuga porque supuestamente entró en pánico.
Algunas personas que estaban por el lugar, pedían ayuda para evitar que el automóvil explotara, mientras que encargados y propietarios de establecimientos cercanos a donde fue el incendio, rápidamente bajaron las cortinas de sus negocios, ante el temor de que sucediera algo más grave.
En cuestión de minutos, arribaron los elementos de Bomberos, quienes inmediatamente sofocaron el fuego y lograron abrir la cajuela para sacar las “marranitas” cargadas con gas.
Mientras tanto, Tránsito desviaba la circulación de vehículos, Protección Civil revisaba si había personas que requirieran atención y los policías municipales trataban de encontrar al propietario de la unidad pero nadie sabía hacia dónde había corrido.
Luego de aproximadamente 30 minutos de temor entre los vecinos así como del trabajo de los cuerpos de rescate sofocaron completamente el fuego del automóvil que fue reducido a cenizas.
ANABEL F. SALAZAR
El Buen Tono
Pies de fotos
