Madrid.- La decisión de un juez de imputar por primera vez a un integrante de la familia real en un caso de tráfico de influencias es inédita, esto por el caso “Nóos” en el que está involucrado su esposo Iñaki Urdangarín.
De acuerdo con el periodista Andrés Aguayo, Urdangarín, esposo de la hija del rey, montó una empresa que realizaba congresos deportivos y organizó algunos contratados por los gobiernos de Valencia y las Islas Baleares por nueve millones de euros que fueron a parar a paraísos fiscales.
El juez inició la investigación contra Urdangarín en el 2007 y seis años después la infanta Cristina tendrá que acudir el 27 de abril al juzgado a declarar sobre el caso de corrupción y evasión de impuestos.
Comentó que la infanta sí puede llegar a pisar la cárcel, de ahí “que estemos en un escenario inédito”.
La casa de ambos en Barcelona, la han tenido que poner como fianza por cuatro millones de euros para que Urdangarín no pise la cárcel por los presuntos hechos cometidos con recursos públicos.
Agencias