Los cementerios de las zonas metropolitanas de México cuentan con 6.1 millones de fosas y tumbas, de las cuales un 83.3 por ciento estaban ocupadas y un 16.7 por ciento disponibles en el primer semestre, cuando hubo una sustancial alza de cremaciones, informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En un comunicado, el organismo informó que durante el primer semestre de 2020 la cantidad de cadáveres inhumados aumentó un 20.2 por ciento con respecto al mismo periodo del año anteriores, mientras que los incinerados un 76.8 por ciento.
Desde el inicio de la pandemia de COVID-19, que roza los 90 mil muertos y 900 mil enfermos oficiales, las autoridades sanitarias han recomendado incinerar a los fallecidos con coronavirus para evitar contagios.