Grupos indígenas de todo Brasil protestaron el miércoles en contra de una propuesta para transferir los servicios de salud para los pueblos nativos del gobierno federal a las municipalidades, ya que consideran que sería un retroceso importante para sus comunidades.
Cientos de manifestantes con atuendos tradicionales y el cuerpo pintado bailaron y oraron durante una protesta frente a la alcaldía de Sao Paulo. Por la mañana, un grupo ingresó al edificio y fue rociado con gas pimienta, según un líder comunitario. En una transmisión en vivo publicada en Facebook, un grupo se formó y golpeó sus bastones al unísono frente a una fila de agentes de la guardia civil, que protegían con escudos la entrada a la sede gubernamental. Realizaron una danza ritual en la entrada antes de salir nuevamente tras negociar con la policía.