Córdoba.- El incompetente y ahora incongruente regidor Jorge San Martín afirma odiar al PRI, pero se ve que sólo en época electoral, porque se pasó todo el trienio levantando el dedo y así autorizó cuanta transa de Portilla se fraguaba en el Ayuntamiento, aplaudiendo a ese ex alcalde al que hasta el IVAI tuvo que multar por negarse a publicar la nómina que se paga con recursos públicos.
Este es San Martín, que dice repudiar al PRI, pero que sí aprobó la Cuenta Pública y hasta las obras sin licitación que Portilla le entregó todas a su constructora “consentida” GOPARA.
Hoy, cínico, se atreve a afirmar que no faltó a una sola junta, coronación, premiación o reunión de su club social, porque esa era “su prioridad”, así pues mientras asistía a ese club para cumplir con sus compromisos, cobraba en el ayuntamiento los más de 43 mil pesos mensuales que los cordobeses hemos pagado y seguiremos pagando a este funcionario incompetente, incongruente y cínico.
Así como se fue del Casino Español porque empezó a convertirlo en un degenere, debería salirse, si conociera la vergüenza, también del ayuntamiento ¡y regresarse a su Chiapas!