Adriana Estrada
El Buen Tono
Región.- El río Blanco es de los de mayor contaminación en Veracruz, puesto que ciudadanos, empresas y autoridades municipales carecen de interés por sanearlo; por el contrario, cada vez se vuelve el principal receptor de desechos.
El afluente, dijeron ambientalistas, se convertirá en el basurero más grande a cielo abierto que exista, gracias a las contribuciones de Orizaba, Río Blanco, Nogales, Huiloapan y Ciudad Mendoza.
Explicaron que debido a su paso por varias localidades, las empresas, industrias y los ciudadanos le arrojan sus desechos sólidos y líquidos, por lo que a pesar de que algunos grupos tratan de limpiarlo, sus esfuerzos se vuelven insuficientes ante el nulo apoyo municipal.
La Conagua catalogó al río Blanco como uno de los afluentes con mayor contaminación, y sin rastro de vida acuática, puesto que en sus 3 mil 130 kilómetros de extensión, la toxicidad es alarmante.
Por ello, se considera el cuarto más contaminado de México, y el segundo en Veracruz, pues aún capta aguas residuales orgánicas de zonas serranas y residuales industriales en tramos no conectados a la planta Firiob en su parte alta.
Mientras que, en la media y baja hasta su llegada a la Laguna de Alvarado, antes de verterse al Golfo de México, recibe descargas industriales y derrames de fertilizantes químicos, porque hay gran número de ingenios e industrias de todo tipo que afectan tierras de cultivo, pesquerías y actividades turísticas.
Habitantes consideraron que es necesario que la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente obligue a los ayuntamientos, entre ellos a Ciudad Mendoza, para que construyan plantas de tratamiento de aguas residuales.
Peligro
El agua contaminada puede provocar enfermedades como diarrea, cólera, disentería, fiebre tifoidea, paludismo, gastroenteritis, esquistosomiasis y poliomielitis, así como algunos tipos de cáncer si lleva metales pesados, los cuales son bio-acumulables.