CÓRDOBA.- La Diócesis de Orizaba se prepara para un regreso a las celebraciones, tentativamente a partir de la segunda quincena del mes de agosto lo que dependerá de la evolución del contagio y las indicaciones del semáforo de la Secretaría de Salud.
En la circular 07/2020 titulado “En razón de la reapertura al culto religioso en tiempo de pandemia”, el obispo de la Diócesis de Orizaba, Francisco Eduardo Cervantes Merino, dirigió un comunicado a los presbíteros, religiosas, consagrados y laicos de esta comunidad para instruirlos sobre las fases de reactivación para la reapertura al culto religioso en tiempo de pandemia.
“Les pido que, con el apoyo de los consejos parroquiales, se vaya diseñando un plan parroquial para la celebración de misas con control de asistentes; así como tener presente las sugerencias para informar con claridad el regreso gradual a las celebraciones y a la vida ordinaria parroquial. Siguen suspendidas la celebración de los sacramentos de iniciación a la vida cristiana, la celebración de bodas y demás celebraciones”.
Hizo hincapié en que una de las repercusiones más sentidas por todos es la crisis económica, por tanto, y para no agobiar a las parroquias, ni a los fieles; decidió cancelar la colecta por los sacerdotes enfermos y aquellos en favor de la Universidad Pontificia de México, quedan pendientes las colectas para los Santos Lugares, el Seminario y el Óbolo de San Pedro.
Además, la colecta del diezmo se realizará este año sin la modalidad de sorteo y pidió no hacer rifas a nivel parroquial, rectoría, comunidades filiales, grupos, movimientos o asociaciones.
ALERTAN
SOBRE FRAUDES
También se alertó a la población de posibles fraudes que se están cometiendo a nombre de la Iglesia. A través de la vocería diocesana se dio a conocer que unas personas en los rumbos de Santa Ana, de la Santa Cruz en Orizaba y posiblemente en alguna otra región están pidiendo dinero a nombre de las parroquias. Se explicó que son personas, acompañadas de jóvenes por lo que “queríamos advertirles que no se dejen engañar, las parroquias no están solicitando ayuda de ese modo. Pasan a los domicilios, no hay que dejarse engañar, ni extorsionar por este tipo de personas que abusan de la situación y así pues pueden cometer fraude”.