Sandra González
EL BUEN TONO
Orizaba.- Ante el trágico asesinato de dos padres de familia a manos de su propio hijo, el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez, señaló que este tipo de sucesos “manifiesta una degradación social a límites muy altos”, subrayando la gravedad de que tales crímenes se den en el seno familiar.
Dijo que la Iglesia Católica expresó su profunda preocupación por lo que consideran un reflejo de la crisis de valores en la sociedad, recordó que “el cuarto mandamiento de nuestra fe, que es honrar al padre y a la madre, está directamente ligado al respeto y la veneración hacia aquellos que nos dieron la vida”.
