Orizaba.- No sólo animales sino los propios humanos sufren y se ven afectados en su salud por el uso de cohetes, advierten los protectores de la fauna, quienes junto con sus mascotas quisieran que no usaran más estos productos al menos en las fiestas patronales que ocurren todo el año.
Erick Cruz es uno de los representantes de la Asociación Civil Proyecto de Rescate y Dignidad Animal y aunque desconoce cifras, afirma que cuando más fiestas tradicionales, populares y hasta religiosas hay, también es mayor el número de mascotas estresadas, algunas incluso infartadas como consecuencia de la contaminación auditiva.
La solicitud, dijo, para controlar o evitar el uso de petardos se ha hecho durante varios años y la sociedad debiera sumarse en esta exigencia a las autoridades de Protección Civil o de Medio Ambiente, pero “en realidad creo que nadie nos hace caso”, indicó el activista.
El problema de contaminación auditiva afecta no sólo a mascotas sino a las personas, por ejemplo enfermos, y es evidente que existe alguna norma, pero que difícilmente
se aplicará.
Los animales en este aspecto están en indefensión y lo dicen reiteradamente los dueños de éstos, pero en realidad la sociedad no tiene una conciencia plena ni se pronunciaría a favor de eliminar el uso de la pirotecnia que termina siendo parte de los espectáculos.
Aunque se mostró respetuoso de las tradicionales fiestas patronales, por ejemplo, dijo que son éstas en donde mayormente la población utiliza en exceso los cohetes y seguramente la intensidad de las detonaciones aumentó cuando dejaron de elaborar esos productos con pólvora y ahora son a base de dinamita, que causan más daño.