La huelga liderada por el sindicato automotor UAW en Detroit, que ya lleva dos semanas, ha tomado un nuevo giro al extenderse a otros 7,000 trabajadores en dos importantes plantas de fabricantes de automóviles. Esta medida afecta a una planta de Ford en Chicago y a una planta de ensamblado de General Motors cerca de Lansing, Michigan.
El presidente del sindicato, Shawn Fain, compartió la noticia con los trabajadores a través de un video, enfatizando que las negociaciones aún no han fracasado, pero que Ford y GM han mostrado renuencia a avanzar de manera significativa en las conversaciones. Es importante destacar que la tercera ronda de huelgas no ha afectado a Stellantis, el fabricante de Jeep.
La planta de GM en Delta Township, cerca de Lansing, es conocida por producir grandes SUV crossover, como el Chevrolet Traverse y el Buick Enclave. El anuncio no afectará a una planta vecina de troquelado de partes metálicas, que continuará operando según lo indicó Fain.
Por otro lado, la planta de Ford en Chicago es responsable de fabricar el Ford Explorer y el Explorer Police Interceptors, así como el SUV Lincoln Aviator. El Explorer Interceptor es el vehículo policial de mayor venta en el país.
A pesar de las tensiones, Fain destacó que los negociadores sindicales aún están en conversaciones con las tres empresas involucradas. Expresó su esperanza de que se pueda llegar a un acuerdo que refleje los sacrificios y contribuciones significativas de los afiliados a lo largo de la última década.
La extensión de la huelga resalta la importancia de estas conversaciones para la industria automotriz y sus trabajadores, y sigue siendo un tema de gran atención en la región de Detroit y más allá.