Un insólito incidente en Sandy, Utah, Estados Unidos, se ha vuelto viral en redes sociales, dejando a los internautas en shock. Michael Murray, un comprador insatisfecho, decidió llevar su frustración a un extremo poco convencional al estrellar su auto contra una agencia de vehículos.
Murray había comprado un Subaru Outback en una concesionaria local de Mazda, pero solo unas horas después, descubrió fallas mecánicas en el vehículo. Según informes de la policía, el hombre regresó al establecimiento exigiendo un cambio o la devolución de su dinero, pero su solicitud fue rechazada.
Enfurecido por la negativa del vendedor, Murray lanzó una advertencia que dejó a todos boquiabiertos: si no le devolvían su dinero antes de las 4 p.m., estrellaría el auto contra el negocio. Y cumplió su amenaza.
Videos captados por testigos muestran el momento exacto en que Murray embiste el vehículo contra las puertas de vidrio de la concesionaria, causando daños significativos. Afortunadamente, no hubo lesionados, pero el impacto generó caos y dejó a los empleados y clientes en estado de alerta.
Consecuencias legales
Ahora, Murray enfrenta cargos por daño criminal y conducción imprudente, además de haber puesto en peligro la seguridad de las personas presentes. Mientras tanto, la agencia afectada evalúa los daños materiales y considera posibles acciones legales adicionales.
El incidente ha desatado un debate en redes sociales, donde algunos usuarios critican la reacción extrema de Murray, mientras otros cuestionan las prácticas de servicio al cliente de la agencia.
¿Qué opinas sobre esta situación? ¿Un acto desesperado o un caso de justicia llevada al límite?
