El hielo marino del norte de Alaska desapareció mucho antes de lo habitual esta primavera, provocando alarma entre los residentes que dependen de la vida silvestre y peces.
El hielo se derritió como resultado de las temperaturas más cálidas del océano, reportó el lunes el diario Anchorage Daily News.
El deshielo anticipado ha sido “una locura”, dijo Janet Mitchell de la localidad Kivalina. Los cazadores de su familia viajaron a principios de junio más de 80 kilómetros (50 millas) en barco para encontrar focas barbudas en el mar congelado. En el pasado, se podía cazar ese tipo de focas justo en las afueras del poblado, pero el hielo marino ha retrocedido hacia el norte.