La gastronomía mexicana es mundialmente reconocida por su riqueza y variedad de sabores, y dentro de ella, los estados de Michoacán y Oaxaca suelen destacar por sus tradicionales platillos. Sin embargo, el estado de Hidalgo ha dado un paso importante al incluir en su Patrimonio Cultural las deliciosas “gorditas de panza”.
A partir de esta semana, el platillo típico de la comunidad de Tepatepec, ubicada en el municipio de Francisco I. Madero, forma parte de la lista junto a otros icónicos platillos de la cocina mexicana como el pozole, el mole, los tamales, los tacos y las enchiladas.
Las gorditas de panza son un auténtico deleite tanto para los locales como para los visitantes, y su popularidad ha llevado a que se celebre un festival en su honor cada año. Este evento busca promover la cultura de la región y brindar a más personas, tanto del país como del extranjero, la oportunidad de probar este delicioso platillo.
Cuentan los pobladores que el origen de las gorditas de panza surgió como una variación de la tradicional barbacoa, demostrando así la creatividad culinaria de la región. La inclusión de este platillo en el Patrimonio Cultural de Hidalgo es un reconocimiento a su valor gastronómico y a la riqueza culinaria del estado.
Además de las gorditas de panza, el Congreso local también aprobó la incorporación de la iconografía, técnica y elaboración de bordados y expresiones textiles del Valle del Mezquital, conocidos como “Flor y Canto”, en la lista de Patrimonio Cultural de Hidalgo.
Con estas acciones, Hidalgo busca preservar y promover su patrimonio cultural gastronómico y textil, reafirmando su lugar como un estado que contribuye de manera significativa a la diversidad culinaria y cultural de México.
