- El Presidente pidió seis meses para terminar con la escalada de violencia
AGENCIA
CDMX.- Al parecer el primer año del presidente Andrés Manuel López Obrador estará marcado por la inseguridad, pues en los últimos meses han ocurrido diversos hechos violentos que han indignado a la sociedad mexicana.
Y aunque el 22 de abril pasado el Presidente prometió que en 6 meses disminuiría la inseguridad, las cifras parecen no favorecerlo, pues hasta el 30 de septiembre, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Pública, se registraron 38 mil 855 víctimas de homicidio.
A continuación presentamos algunos de los sucesos violentos que están marcado la Cuarta Transformación:
EMBOSCADA EN MICHOACÁN
Tres días antes del operativo en Culiacán, el 14 de octubre, un grupo de policías fue emboscado en Michoacán. dejando un saldo de 13 muertos y tres heridos.
La Secretaría de Seguridad del Estado puntualizó que el ataque fue perpetrado mientras los elementos cumplían con un mandato judicial en la comunidad de Aguililla.
En redes sociales circuló el video del momento en que los policías solicitaban apoyo; sin embargo, los refuerzos llegaron demasiado tarde, incluso dieron tiempo a que los delincuentes pusieran narcomantas en las camionetas. Fueron atacados por 30 sujetos que presuntamente pertenecen al Cártel Jalisco Nueva Generación.
El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó los hechos y aseguró que pese a esto, sigue optimista sobre su estrategia para lograr la paz en el País.
DETENCIÓN DE OVIDIO GUZMÁN (CULIACANAZO)
El 17 de octubre en Culiacán, Sinaloa, las autoridades echaron a andar un operativo para capturar a Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, quien se encuentra preso en Estados Unidos.
Durante horas, los ciudadanos vivieron un infierno, pues miembros del Cártel de Sinaloa “tomaron” la ciudad y amenazaron con provocar una masacre si no liberaban a su líder, incluso acudieron a las unidades habitacionales donde residen militares y secuestraron a uno de ellos.
Mientras todo esto ocurría, miembros de la Guardia Nacional y de la Policía Federal tenían retenido a Guzmán López, a quien horas después dejaron libre, para evitar una tragedia mayor, según las autoridades federales.
Para algunos expertos en seguridad, políticos y hasta ciudadanos, la medida tomada por el Presidente no fue la mejor, por lo que manifestaron su descontento a través de las ‘benditas’ redes sociales.
La actuación de las autoridades dejó muchas dudas sembradas, entre ellas, quién fue el funcionario que avaló la misión.
Por estos hechos, Alfonso Durazo compareció en el Congreso dos veces, la primera en la Cámara de Diputados y otra en el Senado; en ambos recintos admitió que el operativo fue un fracaso porque se hizo de manera precipitada y reconoció que se debe analizar la estrategia en materia de seguridad y revisar los protocolos.
ENFRENTAMIENTO EN GUERRERO
Aun no pasaba la conmoción por lo sucedido en Aguililla, Michoacán, cuando el 15 de octubre, en la comunidad de Tepochica, en el municipio de Iguala, Guerreo, se registró un enfrentamiento entre civiles armados y elementos del Ejército Mexicano. El saldo fue de 15 muertos, entre ellos un militar.
Las autoridades informaron que el enfrentamiento ocurrió en la entrada de la comunidad, ubicada sobre la carretera federal Iguala-Chilpancingo, a la altura del crucero de Tepecoacuilco, a unos cinco kilómetros de Iguala. Cuando los civiles armados notaron la presencia de los militares abrieron fuego en su contra y se generó el enfrentamiento, que dejó el saldo de un militar y 14 civiles muertos.
INFIERNO EN MINATITLÁN
El cumpleaños de una habitante de Minatitlán, se convirtió en una noche de terror para decenas de familias, luego de que un grupo armado ingresó a la palapa donde se llevaba a cabo el convivio que terminó con la vida de 14 personas, entre ellas, un bebé de un año a quien le dispararon en el pecho.
El evento, realizado el 19 de abril, estaba programado para terminar a las 22:00 horas. Sin embargo, una hora antes, por lo menos tres sujetos de complexión delgada (según el relato de los testigos), irrumpieron en el recinto denominado “Los Potros”, a un costado de uno de los accesos a la Refinería.
La Fiscalía de Veracruz, en ese entonces comandada por Jorge Winckler, informó que el grupo armado tenía un objetivo muy claro: ir contra una mujer apodada “la Becky”, quien era administradora de un bar gay; sin embargo, las autoridades no han revelado por qué la buscaban.
Y aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó los hechos, fue muy cuestionado, pues dos días antes de lo ocurrido, había prometió que en 6 meses bajaría los índices de violencia en el País, hermano de “El Lagarto”. En Coatzacoalcos también se registró una amasacre en el interior del Bar CaballoBlanco, donde murieron al menos 30 personas.
