Amatlán.- Pese a que no se ha confirmado nada, en el círculo de los productores de caña, existen fuertes rumores de que al finalizar el desalojo, se presentaron algunos desaparecidos, desmintiendo el saldo blanco que se manejó de manera oficial.
Incluso, en las redes sociales y entre trabajadores de los diferentes restaurantes de la zona, comenzaron a circular imágenes de las agresiones cometidas contra los cañeros.
Sin embargo, por el espaldarazo que sufrieron de sus dirigentes locales, ninguno de ellos ha tenido la voz suficiente para levantar sus denuncias y presentar quejas ante Derechos Humanos por las agresiones cometidas.
Uno de los cañeros que recibieron los golpes, es el de apodo “El Pelícano”, quien fue atendido por trabajadores de un comedor, que lo resguardaron en una bodega, hasta entrada la mañana, para después dejarlo ir.
En la zona donde fueron las agresiones, se encontraron a decenas de mujeres que lloraban angustiadas buscando a sus familias, quienes corrieron al ver al tumulto de policías.
“Soy de Matatenatito, llegué hoy en la mañana para apoyar a los demás compañeros, porque de verdad que necesitamos el dinero, pero no sé qué voy a hacer me voy a ir caminando o me siento en una fonda”, expresó visiblemente temerosa una mujer de avanzada edad que caminaba entre los granaderos.
Como esta mujer, muchas más corrían desesperadas por la zona, para pedir ayuda y encontrar a sus familiares, otros más eran buscados en las redes sociales y daban características, de los cuales pocos han sido encontrados.
De la redacción
El Buen Tono