Orizaba.- “Nació el Salvador quien vino a vivir entre nosotros, démosle gracias y estemos alegres”, expresó el obispo, Marcelino Hernández Rodríguez durante una de las celebraciones más importante de la Iglesia católica el alumbramiento del Niño Dios.
“Hay alegría por el nacimiento del Señor en medio de nosotros, es verdadero Dios, verdadero hombre, en la mente y plan de Dios quiso quedarse entre nosotros sabiendo que le íbamos a fallar por nuestro orgullo, arrogancia y poca constancia, eso lo sabía porque muchas veces, incluso, le hemos dicho que no entre en nuestras vidas”, expresó.
Durante la homilía de Nochebuena, reiteró que es necesario que Jesús nazca entre las familias y los corazones para el bien de todos, que existe paz, armonía y solidaridad, “de ser así no existirá violencia y los malos hábitos de la sociedad”.
Indicó que está el mundo en paz, entonces aparece el mecías prometido, cumpliéndose lo que el profeta dijo: “Ya lo tenía planeado y Dios empezó a prepararnos con el bautista”.
Habló de la necesidad de la esperanza, de que Dios ilumine a todos para que estén alegres, que le crean que de él viene la esperanza, de que este niño tan sencillo que viene y se encarna entre los hombres, es como lo vieron los que realmente esperaban al mecías.
“Lástima que estamos tan marcados por el pecado, sus consecuencias no permiten a todos vivir ese reino de enseñanza, inocencia y humildad, en la noche de Navidad necesitamos buscar la paz que viene de esas actitudes en nuestra propia casa y con la familia”, añadió el Obispo electo de Colima.
Omar Celiseo V.
El Buen Tono