- Paramédico de la Cruz Roja
- El cuerpo del joven presentó posibles signos de violencia física y parte del rostro y del estómago fue devorado por aves de rapiña
- Autoridades ministeriales iniciaron diligencias en la escena del hallazgo.
Cuichapa.- El paramédico de la Cruz Roja de Córdoba, Uriel Cano Pérez, reportado como desaparecido la semana pasada en el camino a Tezonapa, fue encontrado muerto en avanzado estado de putrefacción, flotando entre la basura, dentro del caudal de aguas negras del río Blanco, en la comunidad de Toluquilla.
El cuerpo, del rescatista, presentó posibles signos de violencia física y parte del rostro y el estómago había sido devorado por aves de rapiña. Los detectives de la Policía Ministerial Acreditable (PMA) de Tezonapa rastrearon el área en busca de evidencias, ya que en ese mismo lugar, 10 días antes, se localizó el cuerpo del empleado de una pizzería de Yanga, desaparecido en el camino estatal
Providencia-Yanga.
La Fiscalía especializada en delitos de Alto Impacto inició un expediente por homicidio calificado contra quien o quienes resulten responsables. El cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense de Córdoba para las diligencias e investigaciones
necesarias.
La familia Cano Pérez, mantenía una fuerte búsqueda de Uriel dentro y fuera de la región y en el lindero con Oaxaca, ya que tenía la esperanza de encontrarlo vivo.
Los restos de UrielCano fueron localizados alrededor de las 10 de la mañana de ayer, flotando entre la basura del río Blanco, en la localidad Toluquilla, por unos campesinos.
Policías municipales recorrieron el lugar en busca del cuerpo, hasta localizarlo unos 100 metros adelante, en donde a principios de noviembre encontraron otro cuerpo en avanzado estado de putrefacción y con signos de violencia física.
Gendarmes acordonaron el lugar y por las vestimentas que portaba la víctima, reportaron que se trataba del paramédico de la Cruz Roja de Córdoba, desaparecido el 18 de noviembre cuando viajaba en un automóvil Chevrolet Chevy, gris, después de salir de la casa de su hermana en Paraíso La Reforma.
A decir de la familia, Uriel Cano se dirigía a Tezonapa por unos amigos, pero nunca llegó por ellos. El también deportista, vestía al momento de su desaparición una playera de los Tiburones Rojos del Veracruz, chamarra azul y short negro.
Al día siguiente de su desaparición, la familia emprendió movilizaciones para presionar a las autoridades para buscarlo e incluso realizó una manifestación frente a las instalaciones del Mando Único de Córdoba, para exigir su localización.
