Córdoba.- La instalación y próxima apertura de la gasolinera ubicada sobre la avenida 1 y calle 28 decepcionó a los vecinos del lugar.
Aseguran que sus peticiones fueron ignoradas y ahora tienen que vivir con una bomba de tiempo al costado de sus hogares, a costa de favoritismos y de un negocio redondo.
Desde el año pasado, que se anunció la posibilidad de la creación de una gasolinera en la zona, vecinos alzaron la voz en contra del proyecto, al considerarlo poco necesario, —tomando en cuenta la cercanía de dos establecimientos más en la zona—, principalmente por el riesgo que representa para ellos.
A pesar de las peticiones ciudadanas y oficios con firmas que se presentaron para evitar su instalación, el establecimiento está próximo a iniciar operaciones.
Con ello, a los moradores de un edificio habitacional, casas y escuelas, no les ha quedado más que resignarse.
“Muchos de los vecinos no se atrevieron a decir nada por miedo… Quienes nos movimos, igual lo hicimos casi bajo el agua, porque no sabíamos qué iba a pasar o si después nos iban a estar hostigando”, aseguró una de las vecinas del lugar, quien solicitó el anonimato.
La afectada aseguró estar decepcionada por el actuar de las autoridades municipales, a quienes acusó de mantener un “negocio redondo” con los permisos para la instalación de las gasolineras.
Ya que, sin importarles pasar por encima de los derechos de sus gobernados, otorgan los permisos, dejando en claro que “deben tener un alto precio”, en el cual se benefician las autoridades del Ayuntamiento.
Antes de que entre en operación el establecimiento, los moradores pidieron a la coordinación de Protección Civil realice un estudio de riesgo en el inmueble, pues temen que por la antigüedad del lugar existan fallas en los sistemas de abastecimiento de gas que puedan generar una explosión.