Este 12 de octubre, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, realizó una contundente declaración a través de su cuenta en la red social X, afirmando que “no hubo descubrimiento” de América en 1492, refiriéndose a que, mucho antes de la llegada de los europeos, ya existían seres humanos habitando el continente. “Los seres humanos en América ya se conocían desde hacía decenas de miles de años”, expresó el mandatario.
Petro aprovechó la ocasión para invitar a quienes ignoran esta realidad a visitar el Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete, ubicado en San José del Guaviare, Colombia, un sitio que calificó como la “Capilla Sixtina de la Prehistoria”. En esta región, declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco, se encuentran enormes murales de arte rupestre, con más de 20 mil años de antigüedad, que representan el legado cultural de las primeras civilizaciones que habitaron la zona.
Chiribiquete no solo es un sitio arqueológico invaluable, sino también un santuario sagrado indígena y hogar del jaguar. Sus mesetas abruptas, conocidas como tepuyes, y las pinturas rupestres de La Lindosa, lo convierten en un verdadero tesoro biológico y cultural.
La postura de Petro se da en el marco de la conmemoración del Día de la Diversidad Étnica y Cultural en Colombia, en lugar del tradicional Día de la Raza. En su discurso, la Cancillería colombiana destacó la importancia de la inclusión y el respeto hacia todas las identidades étnicas, subrayando que la diversidad cultural es una riqueza para la nación.
Este debate sobre el pasado colonial y la conquista no es exclusivo de Colombia. En México, la sucesora de Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheinbaum, también hizo un llamado a España para que el 12 de octubre se convierta en una oportunidad para disculparse públicamente con los pueblos indígenas por los abusos cometidos durante la conquista. La cuestión de las disculpas por la conquista se originó en 2019, cuando López Obrador envió una carta al rey Felipe VI solicitando que reconociera los agravios históricos, petición que hasta ahora ha sido ignorada.
La reflexión de Petro resuena con una visión que está cobrando fuerza en varios países de América Latina, donde se busca revalorar las culturas precolombinas y cambiar la narrativa histórica sobre el “descubrimiento” de América.
