AGENCIA
CDMX.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que su gobierno no tiene negocios con Grupo Vidanta, pero han aparecido evidencias de que sí los hay y que han coincidido con la contratación y el trámite de la visa para trabajar de José Ramón López Beltrán, lo que aumenta los señalamientos de conflicto de interés que no han podido aclarar.
El pasado domingo el hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador pretendió hacer pública su situación laboral por el escándalo de la “casa gris” de Houston: dijo que trabaja como asesor legal de KEI Partners, una empresa fundada mes y medio antes del arribo al poder del político tabasqueño, por dos hijos de Daniel Chávez Morán, cabeza de Grupo Vidanta.
“Y lo que se dio a conocer ayer o dio a conocer ayer José Ramón, de dónde trabaja, en efecto, es una empresa de los hijos de Daniel Chávez, que me ayuda como supervisión, honorífico, en el Tren Maya, pero no cobra absolutamente nada, ni tenemos ninguna relación de negocios. Él no tiene ningún negocio con el gobierno federal; no hay ningún problema de interés. Es de los empresarios que nos ayuda porque quiere apoyar en el caso del Tren Maya para concluirlo”, declaró entonces el Mandatario.
Sin embargo, en redes sociales el analista de datos Jorge García Orozco reveló que sí hay negocios de Vidanta con el gobierno federal: un proyecto en el aeropuerto de Mar de Cortés, autorizado por el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras).
García Orozco refirió que el columnista Mario Maldonado escribió en El Universal sobre los intentos del gobierno de López Obrador por borrar los negocios que tiene con el Grupo Vidanta.
Maldonado publicó el martes que entre los documentos desaparecidos por el gobierno federal está el del Proyecto de Operación, Administración y Explotación del Aeropuerto Internacional del Mar de Cortés, “administrado por Vidanta, como un punto de acceso a sus centros vacacionales de Puerto Peñasco, Sonora, operados bajo las marcas Grand Mayan y Mayan Palace, en una superficie de casi 120 kilómetros cuadrados, la más grande de todos los complejos del grupo”.
“Bajo el número 0871, la terminal aérea se encontraba enlistada en la plataforma “Proyectos México, Oportunidades de Inversión”, operada por la Secretaría de Hacienda y Banobras, para promover la participación de inversionistas privados en proyectos de infraestructura y energía que se encuentran aprobados para financiamiento público”.
El columnista afirmó que el fin de semana pasado la información respecto a ese proyecto desapareció, casi al mismo tiempo que se daba a conocer el vínculo de López Beltrán con KEI Partners.
Sin embargo, García Orozco se remitió al caché de Google en el que está la copia del sitio que borró el gobierno federal, en el que, dijo el especialista, se puede corroborar que “el proyecto existía y peor aún para ellos, existe, ya que dejaron una huella imborrable en el documento”.
Asimismo, encontró otra forma de acceder al documento del proyecto, además de que en la página se puede apreciar que la “Operadora Aeroportuaria de Golfo de Cortés está conformada por un holding de compañías, entre las que se encuentra Grupo Vidanta”.
Otra huella tecnológica que halló García Orozco es que el documento de Word que presentó López Beltrán fue realizado bajo licencia del Zytech Group, empresa de energía española que también ha tenido contratos en México, como la remodelación de luces en el Centro Cultural Tijuana y para el alumbrado público de Ciudad Juárez.
Por otra parte, Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) dio a conocer otros negocios que Grupo Vidanta ha obtenido del gobierno federal, lo que ha coincidido con el trámite y obtención de la visa para trabajar en Estados Unidos de López Beltrán gracias a la invitación de KEI Partners.
Según la información de MCCI, en 2020 la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales amplió la concesión, hasta 2035, a Desarrollo Marina Vallarta SA de CV, de Grupo Vidanta, de más de 84 mil metros cuadrados de playa en zona federal en Bahía de Banderas, Nayarit. Así podrá darle uso de muro de contención, palapas, restaurante, albercas, áreas verdes, así como para realizar eventos y actividades sociales, culturales, deportivas y recreativas en general.
Asimismo, en marzo de 2020 dos empresas del Grupo Vidanta obtuvieron de la Semarnat la aprobación del proyecto para la construcción de un teleférico que comunicará complejos hoteleros entre Bahía de Banderas, Nayarit y Puerto Vallarta, Jalisco.
MCCI reporta que en 2020 Vidanta obtuvo 35 permisos o concesiones federales, algunos de los cuales están en Los Cabos.
Además, en 2019 las autoridades federales también otorgaron otra ampliación de concesión en el desarrollo turístico Playa Diamante, en Acapulco.
Casi todo lo anterior quiere decir que el presidente López Obrador mintió abiertamente al negar negocios de Vidanta con su gobierno.