Gobiernos deben evitar la violencia

Córdoba.- Considerando el mensaje del Papa Francisco, el obispo de la Diócesis de Córdoba, Eduardo Patiño Leal, señaló que es necesario que las autoridades busquen alternativas para evitar la violencia social, los gobernantes deben sensibilizarse para evitar que la sociedad pierda los valores de la civilidad. 

 

Asimismo indicó que en el caso del presunto desvío de recursos del Gobierno Estatal se debe dar el voto de confianza a las autoridades para que solventen los señalamientos en tiempo y forma.

 

En el caso de los gobernantes, señaló que el Papa fue muy directo y respetando las creencias religiosas de cada representante del pueblo, señaló que los valores de la honestidad y humanidad en cada uno de ellos se debe prevalecer para evitar la preocupación que se da por este tipo de acciones, sobre todo tomando en cuenta que las personas comerciantes informales, no están cometiendo un acto ilícito.

 

“Debe de prevalecer un diálogo, que se puedan canalizar las necesidades laborales pues la gente está sufriendo por la falta de empleos, por eso caen en el comercio informal como una manera de sustento, tendríamos que ver que se podría hacer como sociedad y en conjunto con las autoridades buscar una solución, pero no dejar vacíos que propicien la sensación de que no somos tomados en cuenta o crear una situación que propicie la violencia. Es mejor brindar oportunidades de expresión de la gente y buscar canales que favorezcan un modo de sustento digno” dijo el Obispo de Córdoba.

 

En el caso del posible desvío de recursos del Gobierno de Veracruz, dijo que se le debe dar un voto de confianza a las autoridades y que en el plazo establecido se solventen las observaciones que seguramente así será, y en caso de que se detecte alguna irregularidad o no se puede comprobar este gasto, pues que se sigan los procedimientos legales en contra de los responsables.

 

Señaló que en esta semana se llevará a efecto el retiro espiritual de los sacerdotes con motivo de la Cuaresma para tener un momento de oración, renovar votos sacerdotales, entre otras actividades religiosas.