José Balcázar
El Buen Tono
Córdoba.- El presidente municipal de Fortín, Gerardo Rosales Victoria, nuevamente se encuentra bajo escrutinio público al amenazar a un colaborador de este medio informativo que lo interrogó sobre las condiciones precarias de los vehículos recolectores de basura y las anomalías en su administración. El altercado se dio al finalizar el tercer informe de labores en Córdoba, donde, mientras algunos medios plantearon preguntas complacientes, Rosales perdió el control ante cuestionamientos incisivos.
El funcionario justificó el deterioro del parque vehicular atribuyéndolo a las gestiones anteriores. “Esos camiones que ven en imágenes están así porque así los recibimos. Desde mi primer informe señalé que heredamos 11 unidades de las cuales solo funcionaban dos. Hemos rehabilitado ocho y añadido dos tráileres, pero los descompuestos ya no tienen reparación posible”, declaró.
No obstante, el edil eludió pronunciarse sobre acusaciones que apuntan a un presunto favoritismo hacia el padre de la directora de Servicios Municipales, Lizeth Miranda, en la adjudicación de contratos para alquilar tráileres empleados en las tareas de recolección. Al ser insistido por el reportero, Rosales respondió con advertencias, exigiendo pruebas de las imputaciones o una disculpa pública, y afirmó que renunciaría si estas se comprobaban.