Por: Aleluya Moreno Lorenses Oropesa / columnista
MASS MEDIA E INTERESES CREADOS
El fácil y más barato acceso a los medios de comunicación de masas, como son la televisión, periódicos, revistas, redes sociales de canal libre o paga, nos acerca como nunca en la historia de la Humanidad a la información cotidiana, experta, especialista y científica, repercutiendo en el modo de vida, trabajo y cultura del conjunto de la sociedad.
Saber casi al instante, en tiempo real salvado el lapso que se llevan en viajar las ondas emitidas desde el lugar de origen de la nota en el lugar del suceso hasta el último rincón del mundo con acceso a la pista cibernética, es una gran ventaja inteligente con efectos a pasado, a presente y a futuro económico, político e ideológico, transformándose en una herramienta de poder de doble filo, pero con una sola empuñadura y, al final, dispuesta por quien tenga “el sartén por el mango”.
FRÁGIL RESULTA EL CRISTAL BLINDADO
El impacto de la información en tiempos del bit, kilo, mega, giga y terabytes, trastoca todo permitiendo concentrar desde toneladas de textos en mínimas memorias, hasta el transporte de millones de datos de todo tipo: imágenes, sonidos, colores, contenidos y “continentes”. Sin límites, el poder de la era cibernética desborda tanto lo real como el imaginario, al punto de ser uno de los principales bastiones del poder en todos los ámbitos socio culturales, así como de su debilitada legalidad, dada la precaria condición anímica del ser social y personal.
El injusto enclaustramiento de Julian Assange en la embajada de Ecuador desde hace siete años, fundador de WikiLeaks y considerado por Trump como “centro de inteligencia hostil a los Estados Unidos”, es una muestra importante de la fortaleza/debilitada del medio, resultado precisamente de la capacidad de síntesis del cerebro humano, impulsada eternamente por lo que le da ascendente: contradicciones subjetivas.
Edward Snowden, exempleado de la CIA y de la NSA, experto en informática, en 2013 filtró el uso mundial de los programas espías Prism y Xkeyscore, refugiado en Rusia no se la pasa tragando vodka. Es uno de los principales investigadores del procesamiento de datos al servicio del neo-zar Vlady rasPutin. En la relevancia de los medios cibernéticos para la política de intromisión de preferencias electorales manipulando conciencias al través de los grandes servidores se detecta su huella digital.
DEL CUARTO PODER
AL ‘CUATRO’ PODER
De los tiempos aquellos, señor don Simón, cuando se decía que el periodismo era “el cuarto poder” por la influencia absoluta de las decisiones gobernantes en nuestra vida dirigida por la doblez moralina de oscuras mesas de redacción, a la erudita manipulación de masas ejercida por el Estado profundo y su comunicación social (EP&CS) mediante programas de manipulación ideológica de masas,
hay un abismo no solamente técnico, inclusive filosófico.
A tiempo pasado, porque saber de nuevas situaciones no consideradas u observadas de distinto modo por otros sujetos, modifica opiniones, criterios y conclusiones tomadas por la velocidad del evento, por prejuicios o por autolimitantes.
A tiempo presente: el hecho práctico de saber de más sucesos en sitio amplía las posibilidades
de consideración de
más variables, al mirar
o analizar un fenómeno
o proceso dado.
A futuro, facilita la perspectiva de mejor planear y programar para el desarrollo deseado de la ciencia, de los pueblos, de los individuos y de la casa de todos: la madre tierra.
Cuando se dirimen cosas del poder político a menudo se centran los comentarios, el análisis y las conclusiones en uno o pocos aspectos, omitiendo relevantes o centrales; como ocurre en el “cuatro” de la política electoral, donde con el supuesto constitucional de renovar democráticamente representantes populares, solo se cambia de caretas públicas para, en el fondo, facilitar que los mandarines de siempre mantengan el control de masas, a beneficio de sus intereses económicos.
NO TODO ES JAUJA
EN LOS MASS MEDIA
La pista cibernética se parece a una carretera vecinal, tanto como a autopistas de paga de un País pobre como el nuestro: llena de basura, con trazas irregulares resultado de su mala construcción, topa uno a cada rato con animales, vados de sopetón en épocas de lluvia, hoyos inesperados y socavones provocados, impredecibles o ignorados por las prisas en cerrar círculos
de negocio.
Así como en las carreteras nacionales la velocidad del auto en que viajamos, se combina con la habilidad del navegante para sortear sorpresas supuestas sin omitir la casualidad del indeseable imprevisto, como suele ser una piedra en el camino, otro viajante en el mismo sentido o al contrario, así como un caminante distraído o cruzando la vía de comunicación en mala hora, en los medios de comunicación de masas sucede algo semejante
a un choque indeseado,
pero con diferencias
sustanciales.
Por sus condiciones y resultados, las consecuencias de aberrantes apreciaciones de los medios de comunicación, sus limitantes y su uso potencial podrían ser incalculables e indeseables; como son el hecho de ocultar la verdad a pesar de promoverla, de torcer historias para acomodarlas a cálculos inmediatistas obedeciendo indicaciones externas o peor, resultado de propias censuras.
Televisa en crisis económica, resulta un ejemplo nítido sobre los beneficios erróneamente derramados del poder público al magna cum laude de la manipulación social y cultural de los mexicanos durante generaciones de ahora bisabuelos, abuelos, hijos, nietos, bisnietos y tataranietos, formados en torno de ideas, sueños, intereses y perspectivas pendientes de milagros rosados de la Tía Lupe, hasta hace seis años.
Por el ascenso veloz de otros medios a la preferencia de la gente, ahora resulta obsoleta sobre todo de los millones de jóvenes deseosos de medios y criterios de información ágiles, cosmopolitas,
de criterios abiertos y
categoría abierta.
CARA SALIÓ LA RESTIRADA CARITA
36 mil 500 millones de pesos nos ha costado la promoción de la imagen presidencial federal del fallido presidente Peña Nieto para el 93% de los mexicanos (Pew Research Center), quien resulta más impopular que Maduro, en los restos del Mundo.
En promedio, el régimen se empeña en pagar un millón de pesos por hora en publicidad oficial. En lo que le falta de su sexenio gastará 5 mil 500 millones de pesos más, para llegar a 42 mil millones de pesos derramados en comunicación social.
Mayor al presupuesto asignado al apoyo de los damnificados por los
sismos de septiembre. Mírese nomás la catadura de lo injusto, en un régimen de simulación presidencial el presupuesto de la UNAM para el ciclo escolar 2016-2017, es de 41 mil millones de pesos.
Paliar el desgaste masivo prematuro de Peña Nieto, sale más caro que sostener los estudios durante un año de 349,539 educados por 40 mil 184 académicos en 238 programas académicos, más 339 mil 315 asistentes a programas de educación continua.
RECURSOS ASEGURADOS DEL FALLIDO MAQUILLISTA
Es de entenderse que el Estado profundo haya permitido tal gasto a Peña Nieto en la promoción deslucida de su imagen, pues su unción fue marcada por demasiadas variables adversas, como son crímenes no resueltos durante su gestión de Gobernador del Estado de México, la represión y violaciones sin castigo de Atenco, su incultura manifiesta en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara donde no atinó a nombrar la lectura de tres libros de impacto en su vida, así como por haberse fusilado la tesis que le facilitó el título de licenciado en Derecho de la tristemente célebre desde entonces Universidad Panamericana.
El cuestionado triunfo contra AMLO y Vázquez Mota, acusándolo de haber comprado votos con el apoyo de las tarjetas de Monex-Soriana, tuvo su impacto negativo, así como el uso indiscriminado de los recursos de Progresa con los mismos fines. Sin omitir que apoyar sin medidas su triunfo pírrico permitió el retorno de un PRI mal acicalado al poder federal, después de 12 años de consentir a los panistas el juego de la transición.
Caro resulta el decorado del régimen saliente, apoyado por un medio en declive, a pesar de los millonarios beneficios económicos recibidos de las arcas públicas.
LA MAGIA DE LA NUMEROLOGÍA
Con una diferencia de tres millones de votos con el segundo lugar obtenido por AMLO, Peña Nieto ganó la presidencia en 2012. Si consideramos que 34 millones 162 mil 109 mexicanos se abstuvieron de votar y que la suma de votos lograda por López Obrador, Vázquez Mota y Gabriel Quadri es de 29 millones 825 mil, Peña Nieto fue ungido en contra de la voluntad manifiesta y de facto de 63 millones 986 mil 523 mexicanos, de un padrón de 84 millones 464 mil 713 personas.
Sólo dos de cada diez compatriotas votaron por Peña Nieto, aderezándole el amargo triunfo otros dos votos, aportados por los demás partidos: sólo con la magia de la tabulación rasa facilitada por las matemáticas aplicadas se unge como representante legal, a quien gana la contienda por pocos votos.
Con esa ilegitimidad del sujeto, el EP%CS, impuso a quien sin empachos se prestó para legalizar las reformas pendientes, con apoyo de los partidos agrupados en el “Pacto por México”, variable clave para comprender la bien querencia del Estado con el desprestigiado Peña Nieto. No cualquier perverso acepta pasar a la Historia Patria como el presidente traidor signante de las 11 contra-reformas constitucionales estructurales de 2013; unas sesenta reformas a leyes secundarias y 175 modificaciones hicieron falta para hacer posible una Carta Magna, a
modo del rapaz modelo neoliberal.
APLAUDE LA MINORÍA
AL MALQUISTO
De hecho, el desprestigio inicial de Peña aumenta a pesar de la billetiza distribuida a los medios de comunicación que, lástima, no lograron revertir el desprestigio generalizado de Peña Nieto.
Pero al 6% de los mexicanos les resulta buen presidente Peña Nieto; maravilloso, al 1%, pues durante los 5 años y pico que lleva de Gobierno ha facilitado, ocultado, privilegiado los negocios de oligarquía logrado ganancias por 35 mil 300 millones de pesos,
tan sólo en el primer trimestre de 2017.
El desmonte de la planta nacional y la privatización de la industria extractiva petrolera, de la distribución de gasolina, las minas de metales preciosos y el agua centralizó como nunca la riqueza.
No obstante, mana la fortuna del capital de la diferencia salarial por trabajo igual en la cadena de producción internacional por productividad igual, sobre todo en actividades técnicas especializadas, como es la maquila
automotriz.
Mientras el salario mínimo nacional por hora es de 80.04, en Estados Unidos es de 129.50 y en Canadá de 140 pesos mexicanos.
El estricto control de los trabajadores del campo y la ciudad, así como el moderno esclavismo de la clase media controlada mediante el crédito de sus magras condiciones de vida, son la clave de la concentración del capital.
En tanto esta variable económica laboral no cambie o cambie como recomienda Agustín Casterns: con “…prudencia. (los salarios) no se pueden aumentar de manera sostenible por decreto, hay que respaldar cualquier aumento que se quiera a través de mayor productividad”, el garlito del “cuatro poder” asociado ineludiblemente al poder de Estado, ha de velar por sus intereses estratégicos, sosteniendo contra-corriente al próximo payaso de la feria sexenal.
Y así, sin más variaciones que la levedad impuesta por el cambio de modelo neoliberal al socialdemócrata, sin importar la carita de quien sea proclamado gobernante.
BUllYING PRESIDENCIAL
Se queja Peña Nieto de que las autoridades son sujetas de violencia encauzada por la gente ignorando logros cantados, como los tres millones de empleos creados durante su gestión, omitiendo que resultan del paraíso laboral del flácido salario mínimo; atractor seguro de ganancias extraordinarias para ávidos inversionistas. Reserva el Presidente remitirse a los 90 mil 649 ejecutados en 50 meses de su régimen -entre diciembre de 2012 y enero de 2017- (Aristegui Noticias), penosa síntesis que ofende a “Lesa Humanidad”.
No obstante, sus silencios tienen comparsas. Omitiendo que la bonanza macroeconómica no se refleja en la vida cotidiana del 93% de la población mexicana, la clase política mercenaria generosamente billetada juega imperfecto el papel de saltimbanqui haciendo circo, maroma y teatro entorno de resultados de encuestas amañadas para inflar la flácida campaña electiva del próximo simulacro presidencial, sin importar quien logre un pírrico triunfo, ya previsto por las finas redes del Estado profundo y su centro de comunicación social.